Home Deportiva Tercer Aniversario Luctuoso de “El Pana”

Tercer Aniversario Luctuoso de “El Pana”

0

#ENTRE EL CALLEJÓN Y EL TENDIDO

    •    Se cumplen tres años de la ausencia física del que fuera un último torero polémico de la baraja taurina mexicana, Rodolfo Rodríguez González “El Pana”.


Estimados Amigos con el gusto de saludarlos a través de este espacio de Plaza Juárez. Hace tres años, el 2 de junio de 2016, en el Hospital Civil de la Ciudad de Guadalajara, Jalisco, el valiente y bohemio corazón del diestro tlaxcalteca Rodolfo Rodríguez González “El Pana” se negó a seguir latiendo en el Hospital Civil de Guadalajara, Jalisco y a las 18:45 horas se detuvo para siempre.
No por esperada fue menos dolorosa la muerte de Rodolfo Rodríguez González, porque “El Pana” estaba muerto desde el primero de mayo cuando allá en Ciudad Lerdo, Durango, el toro “Pan Francés” de la ganadería guanajuatense de Guaname le propinó una terrible voltereta, cayendo de fea forma de cara a la arena, con todo el peso de cuerpo en el cuello lo que le provocó la fractura de tres vértebras cervicales, causándole finalmente una cuadraplejia, lesión que representaba la muerte profesional de “El Pana”.
El Torero fue estabilizado en la enfermería de la plaza Rodolfo Rodríguez fue trasladado al Sanatorio Español de Gómez Palacio, Durango, en donde lo ingresaron en la Unidad de Terapia Intensiva siendo atendido por el Doctor Jorge Mario Galván Zermeño, posteriormente fue llevado a otro nosocomio en Torreón, Coahuila y el día siete de mayo trasladado al Hospital Civil de Guadalajara, en donde murió.
Terminó así la vida de un torero genial, bohemio, romántico, irrepetible, un torero emblemático de la antigua escuela del toreo, aquella que enseñaba a los aspirantes a figuras los rudimentos del Arte de Cuchares en la práctica, toreando astados criollos, de media casta y algunas ocasiones de casta aunque toreados, aprendizaje que llevaba a los valientes, y algunos no tanto, de pueblo en pueblo, buscando en las ferias patronales la manera de pegar algunos capotazos y a los más osados brincando cercas para torear vacas en los potreros de las ganaderías las noches de luna llena.
El dos de junio de 2016 la muerte se llevó a Rodolfo Rodríguez González, cerrando la Leyenda de “El Pana”, que debió morir para el toreo la tarde del 7 de enero de
2007, en su despedida de la Monumental Plaza de Toros México, como lo había decidido Rodolfo Rodríguez González, retirándose después de lidiar el lote de la dehesa de Garfias que le había correspondido, pero no, saltó al ruedo “Rey Mago” con el que “El Pana” destapó el frasco de las esencias taurinas y realizó una de las más importantes faenas de su vida, que si bien fue básicamente derechista estuvo llena de detalles artísticos, pinceladas que llenaron el ruedo de la gran México de arte, magia y duende, así lo que debió haber sido su sepelio taurino fue su resurrección y con 55 años a cuestas comenzó a recorrer nuevamente la geografía taurina de la República Mexicana y el extranjero, lleno de ilusiones como un chaval, hasta la aciaga tarde de su encuentro con “Pan Francés”, en Ciudad Lerdo.
Después Rodolfo Rodríguez estuvo postrado 32 días en las camas de los hospitales, como un catafalco en el que yacía “El Pana” sepultado en ese cuerpo inmóvil que se oponía a seguir viviendo, así lo hizo saber a los doctores y su familia; Rodolfo sabía que para alcanzar la inmortalidad un torero debe morir en la plaza.
Un recuerdo a Rodolfo Rodríguez González “El Pana” torero verdad, que no gustó de ajustarse a las normas, que luchó contra todo y contra todos, inclusive contra él mismo, y que seguramente, donde se encuentre, estará “chamuyando de toros”.
Por ahí nos vemos ENTRE EL CALLEJÓN Y EL TENDIDO si Dios lo permite.