
EFE.- El gigante inmobiliario chino Evergrande, cuya deuda asciende a 305.000 millones de dólares, alertó ayer del riesgo de entrar en un proceso de insolvencia, lo que provocó un nuevo desplome de sus acciones e incrementó los temores a que su caída pueda tener consecuencias para el sistema bancario.
Las acciones de la empresa en la bolsa de Hong Kong cayeron ayer más de 11 %, acentuando una tendencia en el último año, en el que Evergrande ha perdido más del 80 % de su valor bursátil.
Un grupo de inversores protestó el lunes en el vestíbulo de la sede de la multinacional inmobiliaria, en la ciudad de Shenzhen (sur), con la esperanza de proteger sus intereses ante la posible quiebra de la empresa.
El grupo Evergrande, fundado en 1996, se benefició de la ola migratoria a las ciudades. En 2009 empezó a cotizar en la bolsa de Hong Kong, donde tuvo un buen desempeño durante los siguientes diez años.