CINE DE HOY
Una de las cintas más divertidas del Festival de Cine Judío que se celebra actualmente en la Cineteca Nacional y otras sedes capitalinas, es Tel Aviv en llamas de Sameh Zombi.
Basada en un guión del propio realizador y de Dan Kleiman, la cinta narra la historia de Salam (Kais Nashib). Un joven que entra a trabajar en la telenovela que da nombre a la película, como asesor de diálogos, gracias a su tío, que es uno de los productores.
Tras la renuncia sorpresiva de la guionista, es ascendido en su lugar.
Sin experiencia en la materia, tiene al menos un buen oído y recoge diálogos populares, hasta que se encuentra con Assi (Yaniv Biton), el militar encargado de vigilar el cruce a Ramallah, por donde tiene que pasar todos los días.
Assi se convierte en su asesor de cómo tiene que comportarse el militar de la serie Yehuda (Yosef Sweid), al que trata de sonsacar los planes militares durante la Guerra de los Seis Días, la espía Tala (Lubna Azabal, la inolvidable intérprete de La mujer en llamas).
Para impresionar a su mujer, Assi empieza a incorporar elementos hogareños a la telenovela, y quiere que la pareja se case.
Tan empecinado está en su decisión, que le quita su identificación a Salam, advirtiéndole que no se la regresará “hasta que haya boda”.
Por su parte el guionista goza de gran popularidad y trata de reconquistar a su antigua novia Mariam (Maisa Abd Ehani).
El director de Bajo el mismo sol, parece haberse inspirado en la cinta mexicana Mejor es que Gabriela no se muera de Sergio Umansky en la que un policía interpretado por Dagoberto Gama obligaba a un guionista a mantener viva a la heroína de una telenovela.
Tel Aviv on fire resulta pues una entretenida comedia que no hay que perderse.