
La madrugada de este jueves uno de diciembre, las lluvias provocadas en el municipio de Tlanchinol provocaron el derrumbe de 9,000 metros cúbicos de tierra, roca y vegetación que bloquearon los dos carriles de la carretera Chalchocotipa-San José, en el tramo del kilómetro 5+600, al 5+668, afectando directamente a las localidades de Rancho Nuevo, San José, Coacuilco, Totonicapa, Maxaquilico, y la vía corta de acceso a los municipios de San Felipe Orizatlán y Jaltocán.
Ante la magnitud del material deslavado, y por instrucción del gobernador Julio Menchaca Salazar, y del Secretario de Obras, Alejandro Sánchez García, horas después acudieron Jorge Alberto Reyes Hernández, subsecretario de Obras Públicas; Enrique Padilla Hernández, subsecretario de Protección Civil y Gestión de Riesgos; y Raúl Lozano Cano, director general de Conservación de Carreteras Estatales, acompañados por autoridades regionales y municipales, a realizar una inspección del lugar, y fue detectada una falla geológica, misma que intentaron examinar por vía aérea, sin embargo, las condiciones climáticas en la zona lo impidieron, y se hizo por tierra.
Tras la detección de la falla, personal de Protección Civil realizó un análisis de vulnerabilidad y del polígono de riesgo y afectación, identificaron que no hay un núcleo de población cercano en riesgo, ni hubo reporte de daños materiales, delimitando la zona de riesgo.