La especialista del Hospital General de Zona (HGZ) Número 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Hidalgo, Silvia Elena Chong Porras, quien ayudo a la recuperación de un producto gemelar el cual fue aquejado por una infección, explicó que la muerte de un neonato es el peor panorama ante el cual se enfrenta un pediatra a la hora de atender a bebés prematuros.
En el hospital ubicado en la ciudad de Tulancingo, a las 35 semanas de gestación, uno de dos varones que nacieron, se vio afectado por una infección en las vías respiratorias, por lo mismo, requirió un manejo aún mayor para evitar complicaciones debido a su bajo peso y prematurez.
Gracias a la atención oportuna del personal de pediatría se logro erradicar el cuadro de neumonía que aquejaba al menor; aun así, se continuó con los cuidados médicos para garantizar el óptimo crecimiento y desarrollo del infante, el cual fue dado de alta tras un par de días.
Las dificultades respiratorias en el neonato debido a la prematturez, ocupa una de las primeras causas de ingreso en el HGZ, ya que llega a presentarse en un 80 por ciento de los pacientes, por lo tanto la pediatra Silvia Chong recomendó la realización un control prenatal regular y oportuno para contrarrestarlo.
Apuntó que un embarazo gemelar suele ir acompañado de diversas complicaciones que llegan a afectar a uno o ambos productos y a la madre, asimismo los bebés prematuros tienen un riesgo más alto de padecer infecciones que ponen en riesgo su salud y vida.
Mencionó que “llevar el control prenatal regular y oportuno, que es aquel que se inicia en el primer trimestre de embarazo; el médico o enfermera vigilan que no haya infecciones urinarias o vaginales que podrían provocarlos”.
La lactancia materna contribuye en la disminución de complicaciones en los recién nacidos, puesto que los menores ganan peso con mayor rapidez y se disminuye en ellos el riesgo de infecciones.
Hizo un llamado a todas las embarazadas para que realicen sus estudios médicos, en especial en los embarazos gemelares ya que se puede detectar con oportunidad cualquier posible complicación y así evitar que suceda, puesto que el peor panorama es la muerte de un neonato.