
Durante 2021, año de elecciones intermedias, la deuda de los estados y municipios llegó a 666 mil 824 millones de pesos, lo que representó un aumento de 4.5% contra el año previo.
Es el mayor monto en que se sitúa el endeudamiento de las entidades federativas, luego de varios años con una tendencia a la baja, y representó un monto adicional de casi 30 mil millones de pesos en un año.
Según información de la Secretaría de Hacienda (SHCP), dicho saldo como proporción de las participaciones que los estados reciben por parte de la Federación fue de 73.5%.
Al inicio del sexenio, en 2018, el saldo de la deuda de los gobiernos estatales y municipales era de 601 mil 218 millones de pesos.
En el Sistema de Alertas que mide el nivel de endeudamiento de los estados, sólo seis entidades resultaron en amarillo durante 2021, es decir, con un riesgo en preventivo o endeudamiento en observación. Se trata de Coahuila, Colima, Chihuahua, Durango, Nuevo León y Quintana Roo.