
Desde el aislamiento por la pandemia del Covid-19, Robbie Williams relata sus planes, el artista, considerado entre los de mayores ventas en todo el mundo, hizo una pausa en cuanto a presentaciones en vivo, así como todos alrededor del mundo, pero entre las nuevas canciones que ha escrito está una dedicada a la Navidad y, por qué no, al coronavirus.
“Can’t stop Christmas” se suma al disco temático que lanzó el año pasado bajo el nombre “The Christmas present”.
“Mi esposa me hizo escribirla, no iba a hacer una nueva canción para el álbum, ella me dijo que estaba siendo obstinado y perezoso, así que me hizo esa cara que pone cuando tengo que hacer algo que no quiero y me dio el título de la canción, ‘ve y escríbelo’, me dijo”, relata en videollamada.
“Tiene una especie de ritmo antiguo y locamente divertido con algunas letras que son un reflejo de la tristeza de este año pero creo que eso es parte de mi personalidad; ha habido momentos en mi vida cuando lo único que me queda es mi sentido del humor, así que hay oscuridad y algo de alegría, también esperanza”, comparte.
En el tema, ya disponible en plataformas digitales, Robbie pone en palabras y bailes navideños lo que muchos han sentido durante un 2020 inolvidable: “Qué año tan miserable pero vaya momento para estar vivo”, se le escucha cantar.
Esos contrastes de la vida los tiene Robbie, quien vive el aislamiento en Londres con su esposa y sus cuatro hijos; considera éste como un momento increíble para el proceso creativo gracias al tiempo libre pero también tiene sus contras:
“Disfruto todos los días ser papá y que mis hijos piensen que soy un papá que se queda en casa, lo que no disfruto es no poder ver a mi mamá y papá, a mi suegra. Esos son los dos lados de la moneda, puedo ver a mis hijos todos los días pero no a mi gente”, se sincera.
La carrera como solista de Williams comenzó a finales de los 90 con sencillos como “Angels” y para 2006 con “Rudebox” ya estaba más que cimentada. Además de reconocimientos como el Grammy, Robbie ha roto marcas. En 2009 estableció un récord mundial Guinness cuando su gira Close Encounters vendió 1.6 millones de entradas en un día y el show en vivo de BBC del Electric Proms show, que se transmitió vía satélite en más de 20 países y más de 250 cines, fue la proyección cinematográfica más simultánea de un concierto en vivo.
Pero Robbie no llega a sentir cierta presión cuando se enfrenta a un nuevo lanzamiento como ahora hace con “Can’t stop Christmas”; señala que siempre hay una cuestión de ego al pensar en tener que ser alguien exitoso.
“No necesariamente estoy hablando de tener un ego como un monstruo, sabes, todos tenemos ego de cierta forma y yo le preguntaría a la gente si le gustaría ser menos exitosa que lo que fue el año pasado, yo creo que dirían que no y yo tampoco lo quisiera”, explica.
“¿Hay algún tipo de presión? No, porque soy muy afortunado de haber hecho suficiente en mi carrera que mi nombre y mi legado me abrirán las puertas para diferentes oportunidades, así que si empieza a ser imposible para mis álbums hacerlo realmente bien, entonces sólo miraré hacia otro género en la industria del entretenimiento y me iré bajo esa fantasía”.