• De “expertos” en milicia, y un Presidente
sin colaboradores leales
De la noche a la mañana todos resultamos estrategas militares solo comparables a Erwin Johannes Eugen Rommel, general alemán de la Primera y Segunda Guerra Mundial, popularmente conocido como “El Zorro del Desierto”. Con autoridad dogmática, han proliferado videos en las “benditas redes sociales” donde lo mismo un pirruris de apariencia (pantalón entallado, mocasines sin calcetines, camisa abierta a mitad del pecho ajustada, barba cuidadosamente recortada y saco dos tallas menores a la que debiera usar el del video) pone el grito al cielo, mienta madres, analiza y finalmente emite un dictamen en que de acuerdo a sus grandes conocimientos de la milicia, reprueba categóricamente el fallido operativo para la detención del “Chapito” en Culiacán, Sinaloa.
Otros, hijos de políticos que por lo menos, sus papás, tuvieron una congruencia lógica en su vida y que labraron su fama con trabajo propio, me refiero al vástago de Maquío, suben al twitter revolucionarios gritos de histeria: “¡me lleva la chingada, dan ganas de irse del país!”. La pregunta es obvia, ¿quién jijos se creen para enarbolar un movimiento que nunca sufrieron, que heredaron por asunto de familia, igual que los recursos económicos y las empresas? ¿Se quieren ir?, pues que se vayan, dudo mucho que el grueso de los mexicanos puedan siquiera pensar en esa posibilidad.
Todos de pronto ya realizaron el análisis que nadie hubiera pensado y ya encontraron el origen del fallido operativo caza-narcotraficante, y seguramente de seguir sus instrucciones hoy mismo todo el crimen organizado se hubiera rendido ante tremenda lección aconsejada por un genio del ciber espacio.
Yo no creo en las “benditas redes sociales”, o cuando menos me resisto a darles toda mi credibilidad, porque la sentencia de Eco (Humberto), en el sentido de que está poblada por una legión de imbéciles tiene mucho de razón, aunque por supuesto no de manera total. Hay muchos, muchísimos que se preocupan por participar en el puente de comunicación más importante de nuestros días, con inteligencia y sin dogmatismos.
Sin embargo la legión es tan numerosa que acaba por impedir se escuche a los que piden diálogo y reflexión. No hay espacio más propicio para los linchamientos como el face, el twitter, el youtube, en fin todos esos lugares donde de pronto aparecen sabios de sabios en cualquier materia.
Y sin embargo un aspecto en el que tanto los medios tradicionales como los de nueva generación han coincidido, es que por ningún lado apareció la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien es la responsable de la política interior del país y de todo operativo que se realice para asuntos de seguridad en el país.
En la infausta hora que la zozobra crecía y el gabinete de Seguridad no atinaba a dar ninguna explicación, resultaba vital, necesario que la titular del segundo cargo más importante en el país, solo atrás del Presidente, saliera por lo menos a mandar un mensaje que convocara a la calma, a la tranquilidad y asegurar que la fuerza del Estado se aplicaría con todo su peso, siempre y cuando no se expusiera a la población civil. Igualmente, ya observado el fracaso, a reconocer públicamente la falta de coordinación entre todos los involucrados y acto seguido asumir abierta y totalmente la responsabilidad, porque ningún sistema gubernamental puede permitir se exponga a su máximo líder a pagar por los errores de otros… y en no pocos casos, ni los propios.
El secretario o la secretaria de Gobernación como es el caso, sabe que su papel fundamental es servir de para rayos a su jefe inmediato. Están consientes que de ser necesario tendrán que auto inmolarse en plena plaza pública para salvar a quien representa la encarnación de sus propios ideales, y por quien estarán dispuestos a todo.
Pueden ser los tiempos nuevos que vivimos, pero el hecho sustancial es que en ninguna época, en ningún escenario puede atentarse contra el líder que se eligió por voluntad propio, y se aceptó colaborar a su lado con absoluta lealtad. Pero eso sucedió.
A López Obrador su equipo más cercano lo dejó solo. Tan es así que el llamado para cerrar filas en el momento crucial en torno suyo, no vino de su secretaria de Gobernación, de los líderes de su partido, sino de un gobernador que no milita en Morena, pero que sabe de institucionalidad y respeto a la investidura presidencial: de Omar Fayad, titular del Ejecutivo en Hidalgo.
Mil gracias, hasta mañana.
jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico
@JavierEPeralta
