RETRATOS HABLADOS

   •    Congreso del Estado, donde manda

uno que ni diputado es

Tarde o temprano quien practica el juego de las dos caras, acaba por quedar evidenciado y la desconfianza que provoca difícilmente puede quedar atrás. En la política parece un arte que pocos pueden dominar, pero hay algunos que logran avances notables al punto de auto engañarse en el espejo.
    Resulta cada vez más evidente que el Congreso del Estado de Hidalgo, su actual presidente, Ricardo Baptista González, representa con creces este papel en que a toda costa busca presentarse como “autónomo e independiente” (a más insistencia de lo que no se es, más sospechas), cuando es evidente que desde que asumió el cargo, sabe que hasta para mover una silla debe solicitar la anuencia de quien lo llevó al cargo.
    De una manera u otra, el líder del Grupo Universidad, Gerardo Sosa Castelán, logró su objetivo central, aún con la abierta desconfianza del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador: manejar a su antojo el Poder Legislativo, a través de diputados y diputadas que le profesan su obediencia y lealtad.
    El Presidente del Patronato Universitario ha sabido manejar un selecto grupo de subordinados, que ya no son los que apenas rebasaban los 50 integrantes, sino que ha crecido exponencialmente para dar vida a un grupo muy numeroso, y donde cada uno recibe ingresos económicos importantes, además de un seguro de gastos médicos mayores que los cubre de cualquier incidente.
    Incluso la sustancial modificación a la Iniciativa de Presupuesto de Egresos 2019 envida por el gobernador, Omar Fayad Meneses, fue modificada en aspectos sustanciales para otorgar a cada uno de los legisladores del Grupo Universidad, suficientes recursos económicos para dar vida a una Secretaría de Obras Públicas alterna a la del Poder Ejecutivo.
    Para lograr lo anterior ordenó a sus subalternos legisladores, recortar gastos como los de Comunicación Social, y mantener una estrecha vigilancia sobre lo que se hace en la materia, porque es de todos conocida la advertencia de Sosa Castelán, en el sentido de que quienes cuestionan sus procederes en automático se convierten en sus enemigos. No hay términos medios con este personajes: o se está con él hasta la ignominia, o en su contra con amplias advertencias de lo que tendrán que padecer.
    La solicitud de desaparición de poderes que ordenó exigieran sus huestes Morenistas en el Congreso Federal sin sustento alguno, dejó en claro que sus ansias por ser gobernador simplemente ya no tienen límite, y que incluso de manera irreflexiva mandó a quedar en ridículo a sus legisladores, porque quedaron como ignorantes de las leyes y vasallos del personaje citado.
    Enfrente sin embargo encontró a un gobernador como Omar Fayad Meneses, que simplemente no cree en la Leyenda que incluso los propios medios hemos contribuido a crear, por colocar en el Santoral de los Demonios a Sosa Castelán, cuando simplemente se trata de un político que como muchos, ha negociado su aparente rebeldía en repetidas ocasiones, y que a mayor edad tendrá que trabajar en la renovación generacional donde solo ve con la confianza necesaria a sus parientes.
    Los diputados del Grupo Universidad acataron la orden de recortar presupuestos, y de manera más que evidente, intentar a toda costa reventar empresas dedicadas a la producción de medios de información impresos, e intentar erigir a su propia empresa universitaria dedicada a imprimir un periódico, como la única alternativa, al contar con un presupuesto concedido directamente, así como lectores voluntarios a la fuerza, a quienes se les descuenta por nómina su suscripción.
    Sin duda es tiempo de que las máscaras caigan por parte de quienes se dicen “autónomos e independientes” en la Cámara de Diputados, y su Presidente de la Junta de Gobierno es representante fiel de este juego.  La serie  de despidos en diarios editados en la capital hidalguense, habla de esta crisis ordenada desde el búnker del Ceuni.

Mil gracias, hasta mañana.

jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico
@JavierEPeralta

CITA:
Los diputados del Grupo Universidad acataron la orden de recortar presupuestos, y de manera más que evidente, intentar a toda costa reventar empresas dedicadas a la producción de medios de información impresos, e intentar erigir a su propia empresa universitaria dedicada a imprimir un periódico, como la única alternativa, al contar con un presupuesto concedido directamente, así como lectores voluntarios a la fuerza, a quienes se les descuenta por nómina su suscripción.

Related posts