* Será diciembre
Hay movimientos finos de ajedrez para estos momentos en el escenario político de la entidad. Algunos se observan desde lejos. Otros solo pueden ser percibidos por los que mantienen su interés absoluto en estos menesteres. Pero a estas alturas, ya nadie puede negar que se hile cotidianamente el tapiz que poco a poco adquiere forma.
La fecha fatal se situaba para el mes de diciembre, cuando todavía en un manejo interno de la información, el Revolucionario Institucional tendría decidido el nombre del candidato o candidata al gobierno del estado. Se antoja que podría adelantarse, aunque formalmente se respetarán los tiempos.
Hay un trabajo que no es público, pero que al final de cuentas es el que surte efectos concretos a la hora buena. Era lógico que bajo ninguna circunstancia, el tricolor pudiera llegar a la fecha que fijan los estatutos sin una decisión consensada con antelación.
No será así.
La gigantesca maquinaria de la que ha hecho gala en cada elección el Revolucionario Institucional ya está en marcha, y seremos testigos, por lo mientras, de cómo cada uno de los que amagaron con irse por la libre, simplemente se desdecirán de sus palabras de manera pública.
Una cosa son remedos de maquinaria, y otra la de verdad, que conocen a la perfección y contra la que simplemente resultaría un suicidio político intentar ponérsele enfrente.
Incluso nadie podría calificar a este o aquella como suspirante impaciente, porque las reglas no escritas de la política hidalguense, hacen ver que en todo momento se ha caminado por los senderos que hoy los que se ven con facilidades transitan.
Pero han empezado, le insisto, los primeros movimientos finos en el tablero de ajedrez, que algunos ya observaron e interpretaron. Se sabe hacia dónde soplan los vientos, pero también que el veleidoso tiempo puede modificar lo que hoy mismo parece asunto totalmente decidido.
Sin embargo los tiempos están adelantados en todo el sentido de la palabra. Los tiempos, que conste, no los elementos que definan todo al final de cuentas.
Será diciembre.
Puede ser antes, pero hasta diciembre existirá suficiente certeza respecto al candidato o candidata.
Por lo mientras ya estamos de nuevo en este popular y eterno juego de la interpretación de cuanto signo se cruce a nuestro paso.
Un ritual que de tanto tiempo empieza a cobrar poderes casi mágicos.
Y en el que nadie puede decirse que está ajeno al mismo.
Pasado el quinto informe del gobernante en turno, la tradición, los ritos señalados, hablan de que los cielos primero se cierran con torrenciales aguaceros, tormentas que incluyen rayos y truenos.
Después viene la calma.
Los cielos se despejan, y la interpretación de los astros es más viable.
Y es cuando se presenta la conjunción de planetas, estrellas y lunas.
Y, justo en ese momento, que se insiste no pasa del mes de diciembre, porque además es el momento que las antiguas escrituras hablan del nacimiento de un Dios, cuando los que aspiran a ser un día cualquier semidioses, o algo por el estilo, reciben la buena nueva de que son los elegidos.
Falta poco tiempo.
Nadie lo dude.
Mil gracias, hasta el próximo lunes.
twitter: @JavierEPeralta
CITA:
Pasado el quinto informe del gobernante en turno, la tradición, los ritos señalados, hablan de que los cielos primero se cierran con torrenciales aguaceros, tormentas que incluyen rayos y truenos.
Después viene la calma.
Los cielos se despejan, y la interpretación de los astros es más viable.
Y es cuando se presenta la conjunción de planetas, estrellas y lunas.
