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RETRATOS HABLADOS

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Asesinato en plena veda

Poco a poco nos acercaremos a una veda de las ideas, de la reflexión, de la capacidad para reaccionar ante una realidad que puede atormentarnos o acercarnos al gozo de la existencia. Cada cual hablará o escribirá de acuerdo a como le vaya en la feria, pero cuando menos, hasta el momento, nadie está obligado, al menos no de manera formal, a lanzar loas y alabanzas.

La veda electoral con motivo de la consulta para la revocación de mandato, que se realizará el 10 de abril, y que entró en vigor el pasado 4 de febrero, implica, se supone, un largo, larguísimo silencio en que es de suponerse no escucharemos ni leeremos nada que tenga que ver con propaganda del gobierno federal, estatal o municipal, y quien lo haga será sancionado conforme a la ley.

Es decir que solo mediante artilugios propios del programa cómico donde un portero gritaba “¡corte mi chavo!”, al que pretendía referirse a determinado personaje de la arena del poder, cambiaba la palabra tal por, es un ejemplo, “brandy de la casa Pedro Domecq”, que lógicamente era el Presidente.

Vaya pues que al de por sí raro país que siempre nos ha tocado vivir, sumaremos ahora la transformación del lenguaje, que dejará en el sótano del pasado el signo lingüístico, porque el significado dejará de ser tal cual el significante.

Una locura, pero que ejemplifica muy bien los tiempos que nos ha tocado vivir, donde personajes de amplia trayectoria, reconocidos escritores, han decidido unirse a la jauría que pretende linchar a un “malnacido” periodista por exhibir los abusos de un junior que se supone no era aspiracionista.

¿Qué nutre este profundo odio hasta en los que, se supone, difícilmente caen en la actitud de una horda de linchadores? 

Tal vez, así puede ser, la imposibilidad de cambiar una forma de ver a una sociedad como la mexicana, que han mantenido desde la juventud, lo que sin duda hablaría de una verticalidad que ya pocas veces se observa en nuestros tiempos. Porque no estamos ante los fanáticos de costumbre, sino de sujetos pensantes en todo el sentido de la palabra. 

No podremos estar de acuerdo con ellos, pero bajo ninguna circunstancia podríamos descalificarlos. Su sola presencia nos habla de amplios sectores del país, que optaron por nunca traicionar sus principios, y eso es algo digno de reconocerse.

Bueno, como quiera que sea, desde el pasado 4 de febrero hasta el 10 de abril, deberemos abstenernos de mencionar cualquier asunto, por mínimo que sea, que tenga que ver con propaganda gubernamental federal, estatal y municipal.

A ver cuántos caen.

MINUTARIO.- Ayer fue asesinado en Tijuana, Baja California, el comunicador Marco Ernesto Islas Flores. Se suma a otros cuatro que han sido victimados en lo que va del año en esa entidad. Se suma a una verdadera ola de crímenes en contra de periodistas que en definitiva ha disparado las alertas, porque se ha convertido en el deporte favorito del crimen organizado, de sectores que no comulgan con la tolerancia ante críticas, pero también con el clima de polarización y odio a todo lo que tenga que ver con medios informativos en el país, porque son malos, muy malos, y solo buscan detener la marcha del gran porvenir que nos espera a todos.

Es un asunto preocupante en todo el sentido de la palabra, y si no se detiene el discurso de odio, que como vemos pasa a la agresión física, nadie podrá detener este lamentable fenómeno.

Por el bien de todos es fundamental que se detenga la palabra de odio y polarización; por el bien de todos es primordial la consigna primitiva y salvaje del “divide y vencerás”, porque no habrá victoriosos, y sí en cambio puros derrotados si esto sigue así.

Mil gracias, hasta mañana.

jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico

@JavierEPeralta