Reconstruir la política

Por muchas razones es tiempo de plantear como algo fundamental, que las pre-pre-campañas en tiempo de pre-pre-candidatura al gobierno de Hidalgo, no deriven por asuntos de conveniencia política en una pelea callejera que, al final de cuentas, sólo deja como saldo más confusión entre el electorado, pero fundamentalmente la idea de que si alguien tuvo la idea de que pollera igual a buscar consensos, estaba totalmente equivocado.

Luego del triunfo en Nuevo León del “fosfo fosfo”, se tiene la sensación de que cualquiera puede ganar, siempre y cuando atine a elaborar un discurso que logre el beneplácito del “respetable”, que lo mismo se puede enamorar de un ocurrente abanderado, que de un bravísimo contendiente, que promete no dejar títere con cabeza.

El asunto es que le compren alguna de sus ocurrencias, para que en automático gane.

Sin embargo todos sabemos que caminar por esa vertiente acabará por dar la razón a quienes afirman que la política ha perdido su razón de ser, y que luego entonces debiéramos pensar en darla por difunta, que además el Estado natural del ser humano es tomar lo que pueda por asalto, y que el más débil sucumbir ante el más fuerte.

Hay tiempo de rescatar el calor original de la política,  de rehacer el camino, y encontrarnos con el escenario anhelado por todos donde sea la razón y no la fuerza, el factor fundamental para el triunfo. 

Hay tiempo si uno quiere, si hay voluntad de construir, o reconstruir seguro caso, el ejercicio real de la política.

Hay tiempo.

Mil gracias,  hasta mañana.

jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico 

@JEperalta