
Descalifica elecciones el que ya perdió
Mal pinta la elección del 6 de junio para Morena y aliados no solo en Hidalgo, sino en la mayor parte del país. Con todo y el voto cautivo que el Presidente de la República ha logrado a través de becas y pensiones, que evidentemente sí votaran a favor de los candidatos que impulsa abiertamente, no le alcanzará para su objetivo fundamental de controlar de manera absoluta el Congreso federal, además que en varios Estados del país donde cantaba victoria por adelantado el panorama es poco menos que desastroso.
Resultaría ocioso abundar en las actitudes asumidas por el primer mandatario de la nación cada vez más cercanas a la ira incontrolable, y que solo confirman versiones que hablan de una caída escandalosa de cada uno de sus abanderados de Morena y partidos que lo acompañan, en las preferencias electorales.
Incapaz de ocultar la frustración que empieza a generarle las encuestas reales con datos reales, no los suyos, Andrés Manuel López Obrador ha perdido la compostura en varias ocasiones, pero lo más grave: decidió descalificar de una vez y para que quede claro, los comicios del mes próximo, y anotó que por eso mete las manos, “porque no puedo ser cómplice del fraude electoral”.
En Hidalgo los del Grupo Universidad, principal beneficiario del acuerdo realizado con los entonces promotores de la campaña del hoy Presidente, a quienes les entregaron diputaciones federales y locales, no saben si reír o llorar cuando un día hacen que les sueltan los casi tres mil millones de pesos que trajeron de una cuenta radicada en Suiza, y al otro les dicen que siempre no, además que su máximo líder está por cumplir nueve meses de permanecer encerrado en el penal de El Altiplano.
Con todo y que el personaje citado ha girado instrucciones a sus diputadas federales y locales para que no den la espalda al gobierno de la 4T, es claro que emigrar al Partido del Trabajo porque les presenta “mejores condiciones de maniobra”, es un primer paso para amagar con acciones contrarias al proyecto presidencial de ganar la reelección, aunque esa posibilidad parece poco menos que imposible.
Falta muy poco para las elecciones del mes de junio, y por su parte el Revolucionario Institucional, cuando menos en territorio hidalguense, ha dejado muy en claro que no juegan a hacer política y cuando es necesario unirse y mostrar verdadera disciplina lo hacen sin ningún problema.
La presencia en eventos de campaña de candidatos a diputados federales, pero fundamentalmente de Benjamín Rico, de los ex mandatarios Miguel Ángel Osorio Chong, Francisco Olvera Ruiz y ayer, Manuel Ángel Núñez Soto, hacen ver que si alguna querella pudiera existir entre alguno de estos personajes simplemente queda borrada cuando la convocatoria es a dar una muestra clara y abierta de unidad.
Núñez Soto, reconoció al abanderado de la alianza PRI-PAN-PRD, y puntualizó que a Hidalgo le hacen falta legisladores federales que lo defiendan, además de puntualizar que es urgente que México cambie de rumbo.
Lo que se observa es un poder presidencial que ya no hará ganar en automático a los candidatos de Morena. La tarea se ve poco menos que imposible.
Y si a eso sumamos las reacciones cada vez menos controladas del Presidente, cegadas por la ira y rabia, pocos podrían sacar como conclusión que tantos ataques a diestra y siniestra, y la descalificación de los comicios donde adelanta un fraude, sean de un triunfador.
Todo lo contrario.
Mil gracias, hasta mañana.
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@JavierEPeralta