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RETRATOS HABLADOS

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RETRATOS HABLADOS

Francisco Xavier, una burla para los morenistas

Conceder al cantante o ex cantante, Francisco Xavier, la primera posición en la lista de candidatos plurinominales al Congreso de Hidalgo, dibuja con exactitud lo que es Morena en la entidad: un remedo de partido político dedicado a tomar lo que sea y otorgarle candidaturas para buscar darse una fisonomía y terminar hecho un esperpento.

Ex diputado federal, ex Senador de la República, ex candidato al gobierno de la entidad, estamos ante un personaje sui generis porque todos saben que como legislador fue una nulidad, pero además proclive a dejar el partido que lo llevó a uno de esos cargos para brincar a otro en el que veía mejores posibilidades para su futuro político. 

De trabajo a favor de su tierra natal mejor ni preguntar, porque además de su incapacidad académica para formular alguna iniciativa de ley, ha sido evidente que ser arquetipo de los representantes populares sin conciencia social o compromiso, es su misión en la vida.

Morena-Hidalgo desprecia con absoluto descaro a la verdadera militancia que tiene en la entidad, y por ejemplo deja fuera a una Tania Meza Escorza, doctora en Comunicación por la UNAM, ex titular del Concejo de Administración Municipal de Pachuca, experta en cuestiones de género, pero sobre todo comprometida con las luchas sociales en territorio hidalguense. Es decir cambia el oro por la basura.

¿De qué se trata?

Primero pagó con creces al Grupo Universidad el supuesto donativo millonario con dinero mal habido para la campaña presidencial, y le entregó en bandeja de plata buena parte de las candidaturas de la legislatura local que está por terminar. Luego metió a la cárcel al filántropo que antes, según comentan, le había entregado una importante cantidad de recursos económicos.  ¿La militancia, las bases? Poco importaron. En ese entonces justificaron todo con la frase, “si es necesario hacer alianzas con el Diablo, las haremos, lo importante es ganar”.

Pero a estas alturas, ya con la conciencia limpia por el dinero malo que les quemaba las manos y con su benefactor en El Altiplano, ¿qué mensaje mandan con entregar la primera posición de sus plurinominales para la Cámara de Diputados del Estado? Solo hay uno: la militancia, los seguidores reales del Presidente de la República, los que pese a todo creen en él, reciben una patada y un escupitajo con Francisco Xavier como seguro representante popular.

¿Qué esperan a cambio los líderes de Morena en Hidalgo? ¿Lealtad? Por supuesto que no, lo conocen y saben que saltará a cualquier otra embarcación si le sirve de nuevo escalón; saben que incluso se volverá en su contra porque es su naturaleza y porque no tiene noción alguna de lo que debe ser el ejercicio inteligente de la política. Sabe de grilla, de ofender en debates a sus contrincantes, de difamar a quien se le ponga enfrente. Sabe pues ser artista, pero artista de los que arman teatros para jalar cámaras.

Pero de política en serio, no. Lejos de prepararse para dejar atrás discursos incendiarios, mantiene una ignorancia supina del quehacer que desempeña para ganarse la vida.

Sin embargo la culpa no es de él.

Morena-Hidalgo una vez más traiciona a sus militantes, a sus bases, a los que creen en un proyecto alternativo de poder, y entrega no una candidatura sino una diputación, a un personaje que incluso se dará aires de hacerles el favor cuando ya se considera de otro nivel porque hace escándalos, difama, miente, miente y miente.

Una lástima para los morenistas, que sí lo hay y muy inteligentes, que les impongan una candidatura tan lamentable, porque suena a burla, a humillación.

Mil gracias, hasta el próximo lunes.

jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico

@JavierEPeralta