Enfrentamiento entre pobladores de diferentes comunidades, debido a que unos están a favor y otros en contra de la remodelación de la Plaza Cívica de la cabecera municipal.

La mañana de ayer vecinos de las distintas comunidades, así como de la cabecera municipal se concentraron en la plaza pública, unos para vigilar que arrancaran los trabajos de remodelación de la Plaza Cívica y otros para impedir que ingresara la maquinaria a derribar lo que por años funciono como biblioteca pública, misma que consideran patrimonio cultural de su municipio.

Ambos grupos primero se hicieron de palabras y salieron a relucir los dimes y diretes, las ofensas verbales; y cada uno dio sus razones de porque debe remodelarse el área de la plaza central y otros porque no debe destruirse lo que ha identificado a su localidad.

Para apoyar el proyecto de remodelación de la Plaza Cívica que pretende iniciar el gobierno municipal del alcalde Asael Hernández se concentraron alrededor de 200 pobladores, en tanto que para impedir los trabajos era un grupo más reducido.

A la llegada de la maquinaria el grupo que está en contra de que se ejecuten los trabajos impidió que ingresara a derribar las zonas a remodelar, por lo que el conductor de la retroexcavadora decidió retirarse.

Posteriormente los pobladores que están a favor de que los trabajos se ejecuten comenzaron con un marro a derribar parte de la construcción de lo que fue la biblioteca pública, mientras que otro joven rompía los cristales en la parte alta del área que lo que en su momento funcionó como taller y fue en ese momento que el enfrentamiento desató entre ambos grupos.

Hombres y mujeres se enfrentaban cada uno para defender su punto de vista, sobre si debe o no ser remodelada la Plaza Cívica, por lo que comenzaron los empujones, golpes y manotazos esto frente a los uniformados de la policía municipal quienes solo permanecieron como espectadores, ya que en ningún momento llamaron al orden a los rijosos de ambos grupos.

Cabe hacer mención que al lugar no obstante a que es una obra impulsada por el gobierno local, la autoridad local tampoco hizo acto de presencia para poner orden o a explicar el proyecto y de esa manera evitar el enfrentamiento entre pobladores del mismo municipio.

Solo funcionarios públicos y colaboradores del gobierno municipal se acercaban a la explanada y comentaban indirectamente que la obra ya estaba autorizada y que se iba a ejecutar se opusiera quien se opusiera.

Más tarde se conoció que el gobierno local pidió apoyo de seguridad pública estatal, para resguardar el área, con la finalidad de arrancar los trabajos y así evitar un nuevo enfrentamiento entre los tezontepenses.