
El programa del Festival Internacional Agustino Mañutzi estuvo cargado de torpezas logísticas que ocasionaron que los eventos programados en el escenario de El Jagüey, se retrasaran y que artistas previos a Regina Orozco estuvieran en un escenario con un área preferencial semivacía.
Así ocurrió con el homenaje a Mercedes Sosa y el grupo Huitzin, incluso con Cecilia Touissant, cantante, compositora y actriz mexicana, quién a pesar del frío, unos inconvenientes con el audio, y con lugares reservados vacíos en la parte “preferencial” dio un gran espectáculo para la gente que se acercó a escucharla.
Cabe destacar que en el área “preferencial” reservada para funcionarios públicos municipales y estatales, así como invitados especiales y gente a la que se le otorgó un boleto, generó una sensación elitista y discriminatoria para gente que a pesar de los lugares vacíos tuvieron que estar mucho más lejos del escenario.
Para cuando Regina Orozco subió al escenario, mucha gente que esperaba que el programa se llevara a cabo con puntualidad, se había retirado del lugar, debido además del actuar de los organizadores, el clima frío los corrió antes de que concluyera la jornada del primer día del Festival Internacional Agustino Mañutzi.
Por su parte, Regina Orozco, deleitó al público con un espectáculo cómico musical en el que presentó diversas canciones contenidas en su álbum, “Canciones para planchar”, hizo un reconocimiento a la diversidad sexual e interpretó canciones como: Simplemente amigos, Sálvame, Mujer contra mujer, A quién le importa y muchas más.
Finalmente, tras despedirse y lograr la ovación del público, la soprano y actriz mexicana, cantó una última canción “Paloma negra” con la que se despidió del público que acudió hasta el municipio de Actopan para verla y escucharla, sin duda fue el carisma y el gran trabajo en el escenario de la “Reina gay vitalicia” lo que salvó la primera noche del festival.