
CINE DE HOY
El cantante y compositor uruguayo Alfredo Zitarrosa (1936-1989) fue una de las figuras más importantes en la década de los sesenta. Marcado por el exilio no alcanzó la fama que merecía su talento.
En la Cineteca Nacional se acaba de estrenar Ausencia de mí, una interesante cinta de Melina Terribili que arroja algunas luces sobre su vida.
Sus dos hijas, Serena y Moriana donan cientos de cajas a las autoridades en las que se encuentran grabaciones, escritos, fotos y películas que poco a poco dan una imagen del artista.
Su madre lo encarga a la pareja formada por Carlos Durán y Doraisella Carbajal que lo cría como hijo propio y lo alienta a seguir su carrera.
Ya adulto, regresa con su madre Jesusa Blanca y adopta el apellido del esposo de éstam Alfredo Nicolás Zitarrosa.
En 1976, tras de que sus canciones son proscritas por la radio por la dictadura militar, Zitarrosa parte hacia el exilio a Argentina y posteriormente a España, y México.
Regresa a Uruguay en 1984 recibiendo una recepción multitudinaria que describe como “la experiencia más importante de mi vida”.
Se queja sin embargo, de que no puede vivir de su arte, “pues sus camaradas le piden que actúe gratis”.
Su vida familiar apenas y se toca, aunque admite que su matrimonio fracasó por su culpa. Tampoco hay muchas de sus canciones, aunque su popular Adagio de mi país se repite dos veces.
Pese a todo ello, Ausencia de mi resulta un entrañable filme sobre un artista comprometido con su arte, que no hay que perderse.