¡QUÉ CASUALIDAD!

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¡QUÉ CASUALIDAD!

ALFIL NEGRO

En los últimos días se han dado hechos que como todos, tienen un origen y una intención, un autor y una meta, y cómo se dice son cunas que mecen manos interesadas y más en los tiempos que vivimos en Hidalgo de relevo de gobernador, con la particularidad de que ahora no es del PRI como ocurrió durante 93 años, sino de Morena, que puso en la lona a la candidata panista-priista- perredista.

No es casual que en cuestión de horas se presenten problemas en el Cereso de Pachuca, que en Atitalaquia la administración municipal meta reversa al basurero regional y que en Tecolotitla Comunidad de Atlapexco exijan que la alcaldía les invierta 6 millones de pesos en obras, que ellos decidirán con el añadido de que ellos administrarán el dinero.

Por lo menos es lo que exigieron.

En todos los casos se debe hacer notar que mueven las acciones los llamados ACTIVISTAS, que desde hace buen rato son quienes se hacen presentes en los reclamos de la gente, con una representatividad medio rara y se supone que sin colores partidistas, aunque la verdad como dice no sé quién “vaya usted a saber”, pero de que los activistas han encontrado terreno fértil para su presencia sin duda alguna.

Ahora mismo recordamos cuando hace buen tiempo en Mineral de la Reforma, se detuvo un vehículo donde una funcionaria de la UAEH transportaba una buena cantidad de dinero y se negó a bajar de la camioneta, lo que permitió la llegada de una activista que armó todo un circo en defensa de la funcionaria universitaria.

Aquí desde luego la activista ya actuaba al servicio de una bandera y no lo que se supone que debe ser un activista, como alguien que está a favor del cambio sobre todo en asuntos políticos y sociales, ante lo que se supone de ineficacia o de falta de acción de la autoridad.

Algo no debe estar funcionando bien en el ejercicio de la política cuando son los activistas los que por todos lados se hacen presentes y no quienes son elegidos por los ciudadanos para que los representen con actividad que lleve a consensos y decisiones responsables, y no por la libre en que sólo se exige pero no se aceptan responsabilidades, porque eso ya limita el grito o la denuncia, porque en la solución algo se tiene que hacer para seguir en el camino.

Decididamente estas cunas que se mecen por todos lados, tienen manitas atrás que lo hacen. Es la hora y el momento, y se hacen presentes.

En todo caso si la intención es buena, bienvenida la presencia de todos los que sumen para resolver los problemas, pero no deja de ser por lo menos raro que al final de un gobierno y el inicio de uno nuevo y cuando el PRI ya no turne presencia se multipliquen estos casos.