¡Los ricos también lloran!
A decir de los resentidazos sociales, fifís somos muy aburridos y predecibles, que nos hace falta barrio y un poquito de impulso, para que nuestras manifestaciones puedan cuajar. De por sí dicen, que la cream de la cream, se ha identificado por insípidos y faltos de imaginación, por eso caemos gordos, por chocantes. Deberíamos contratar a Lady Pizza, para que nos dé unas clases de cómo protestar, sacando al Ecatepunk que todos traemos dentro, pero que no nos atrevemos a mostrar, porque simplemente no sabemos cómo hacerlo.
Lógicamente, en estos tiempos en que el resentimiento social ha cobrado una fuerza brutal, no pueden ver que uno pueda superarse, de un tiempo a la fecha, está muy mal visto que uno sea pipirisnais y que uno ande en camionetas de modelos recientes, quejándonos por la falta de oportunidades. Ayer nuevamente la clase fifí, salió a las calles para protestar contra AMLOBB, quien ha sacado el Salinas que todos llevamos dentro, ni los ve ni los oye.
Esto nos deja clara una cosa: que los ricos también lloran, se ofenden y hacen berrinche, pues a pesar de su poder económico, no son ajenos al dolor causado por la tragedia humana y la tristeza, esa que da cuando no se tiene a la mano una copa de un buen vino tinto, un corte importado carítsimo, una botella de agua importada porque la Bonafont o la Ciel, si acaso sirven para algo, sería para enfriar el radiador.
Otro que también está perdiendo el estilo para protestar, es el presidente municipal de Ixmiquilpan, Pascual Charrez Pedraza, quien ha recurrido a la presión digital, por la simple razón de que las redes sociales se han convertido en el terreno más fértil de los reclamos y del resentimiento social, donde hay quien se queja desde la inseguridad, hasta de quien se haya comprado un paste de arroz con leche y le resultó de papa con carne, que en el lenguaje más vil del pueblo, eso significa que te dan gato por libre o camarón por langosta.
Y todo por unos condenados baches. El equipo del presidente municipal, a través de su grupo de WhatsApp, se solicitó extender la solicitud a sus agremiados y trabajadores del ayuntamiento, para reportar una cuenta de Facebook de un medio local y conseguir su suspensión. Envueltos en la bandera de Juan Escutia, se lanzaron contra el medio local, por evidenciar que la herencia más tangible de la administración al actual alcalde, serán miles de baches en calles de la ciudad, donde por más que le echan ganas, nunca van a poder brillar en sociedad, todo por culpa del presidente en turno.
Los que sí mantienen vigentes sus usos y costumbres, son los habitantes de López Rayón, una comunidad de Ixmiquilpan, quienes sacaron el estilo Lady Pizza que traen dentro, para protestar contra la Comisión Federal de Electricidad (CFE), llevándose retenidos a dos trabajadores y reclamar por el aumento del precio en el servicio.
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