“La porra te saluda”
Nomás pa´ que vean de qué cuero salen más correas, esta semana fuimos testigos de una lucha épica sin límite de tiempo, una competencia que se prestaba para decir, ladren perros, aquí solo nuestros chicharrones truenan y luego hacerles un desprecio tipo, “huele mi champú”. La cosa estuvo así, resulta que nuestra cabecita de algodón, nuestro Tlatoani, nuestro emperador, AMLOBB, visitó Hidalgo, la tierra más calurosa, ahí donde cuando alguien muere, al llegar al infierno regresa por su cobija, se dio el enfrentamiento más importante del que se tenga memoria, o sea de porras.
Los de Morena como siempre, ordenados, comportados, firmes a sus principios de autocontrol, en silencio, esperando la venida del Señor, López Obrador, los del PRI, fieles también a sus orígenes de diplomacia política, se brincaron las vallas, mentaron madres y se metieron como Juan por su casa para abuchear a nuestro preciso y darle una sopita de su propio chocolate.
¡Ay ternuritas! Llena de optimismo ver, que los priistas siguen fieles a los principios de nuestros usos y costumbres, así como en Huejutla, uno se llena de optimismo ver, sobre todo los jóvenes, que no dejan morir lo que bien se ha aprendido. Sin embargo, los resentidazos sociales, dirán que estos chavos en serio no han aprendido nada, que en vez de elevar el debate y recuperar la confianza de la sociedad, siguen echándole tierra a su propia tumba, con acciones que sino dan risa, por lo menos dan pena ajena.
Son tan fieles a sus usos y costumbres, que siguen regalando cobijas, despensas, pintura, haciendo ver sus acciones, como logros incansables, saludando con sombrero ajeno. Los resentidazos sociales, ya solo falta que salgan a decir que, justamente este tipo de cosas son las que provocaron el hartazgo social.
Hablando de esas cosas que caen mal, los que justamente caen gordos, son los de Ecología del estado, que nomás andan de chismosos a ver quién cae o resbala, haciéndonos ver como unos cochinos ante la sociedad solo porque tenemos algunos hábitos de higiene que a cualquiera se le puede pasar, como el hecho de no poner la basura en su lugar. Como el caso de Ixmiquilpan, que le clausuraron su basurero, nomás porque lo tenía a cielo abierto, sin saneamiento y violando todas las leyes ambientales, o sea ya, que delicados.
En serio ya no puede uno meter el polvo debajo del tapete cuando llegan las visitas o subir al firulais a la azotea para no generar incomodidad, porque luego, luego van con el chisme de que uno de sucio, desconsiderado, antihigiénico y así simplemente es de ese tipo de vecinos indeseables, nomás porque nuestra mata de chayotes o de plátanos se brinca para el terreno de al lado, dejándoles un basurero, provocándonos la duda si lo que cuelga de la barda para acá es nuestro o del dueño de la planta. Algo así pasó con los de Tasquillo, quienes se quejaron del basurero de Ixmiquilpan, porque se brincaba para sus terrenos, cuando reclamaron que esos desechos no eran suyos, los ixmiquilpenses también negaron la basura y es ahí donde torcieron el rabo hasta lograr que fuera clausurado.
En corto:
- Esta semana, se espera que Ixmiquilpan, logre un acuerdo con vecinos de El Mandhó, para instalar ahí el relleno sanitario, luego de ser clausurado por autoridades ambientales de Hidalgo.
Sígame en twitter
@MarkoCabanas
Mi correo
markorey2013@gmail.com
