“No manchen”
Hasta el Presidente Peña anda preocupado y los escépticos siguen sin creer que un demagogo pueda apoderarse de la Presidencia de la República, que nomás de imaginarlo nos pone a rechinar los dientes de la preocupación, que en un sexenio se ponga reversa al progreso y las condiciones de comodidad que estos gobiernos nos han heredado. Lo que nos consuela, es que va a poner a trabajar a toda la maquinaria del Estado para impedir que eso pase, pues los energéticos, las costas, las minas, entre otros bienes, que pasaron a manos de los extranjeros, perdón que se abrieron al capital privado, vuelvan a ser de la nación, eso no puede ser, sería un retroceso, ideas dogmáticas que ningún país de primer mundo que presuma de serlo se puede dar ese lujo.
Que López Obrador se convierta en un Robin Hood no sorprendería a nadie, lo que preocupa de él es que vaya a querer combatir a los Gobernadores, presidentes municipales, ministros, nomás porque de un tiempo a la fecha, digamos que desde el precámbrico temprano, los actos de corrupción se han convertido más que en una debilidad en una fortaleza que nos ha dado fama mundial como país, que obviamente no se puede permitir que se combata algo que nos distingue, que son ya parte de nuestros usos y costumbres, pos’ qué le pasa.
Hablando precisamente de los principios, de esos que se aprenden bien, quien ha demostrado que un buenazo en eso, es el exdiputado federal, Edmundo Ramírez, quien está sacando al Obrador que lleva dentro, pero no para combatir a la corrupción o para denunciar las injusticias, no, sino, “regalando” chácharas a las familias más desprotegidas, a las que siendo representante popular no atendió mientras estuvo el cargo.
Resulta, que a casi un año de nuevas elecciones, el ex legislador le salió lo samaritano y anda más hiperactivo que un chico en edad de la punzada, urgido de aceptación social, publicando en sus redes sociales, desde cómo le amaneció, dónde anda paseando, qué regalos anda dando, qué come y al paso que va, en una de esas hasta publica una foto de lo que comió ayer. Los resentidos sociales seguramente dirán que es un oportunismo, pues la bondad no se difunde ni se presume, o peor aún, trafican con la desgracia humana, es en serio, nada les parece.
O sea, qué insensibles son, apoco no pondría usted cara de compungido nomas de ver la foto donde aparece yendo a visitar al padre de un joven que murió en los Estados Unidos donde encontró la muerte en vez del sueño americano. Pero lógicamente, esos que están en contra de todo y a favor de nada, dirán que eso que hace es no tener progenitora, pues eso es lucrar con la desgracia humana, pues el drama del pobre hombre fue captada en una fotografía que después el exdiputado difundió en sus redes sociales, presumiendo haberlo ido a saludar, consolar, asimismo de haber intervenido para repatriar el cuerpo de su hijo, que obviamente no le costó ni un peso o esfuerzo, porque el gobierno mexicano y del estado, cuentan con mecanismos legales, asimismo recursos para apoyar a quienes viven ese problema.
Donde igual se pasaron de la raya, fueron los representantes de diversos sectores de la sociedad y empresarial, incluyendo al presidente municipal de Ixmiquilpan, Pascual Charrez, que tienen manos de estómago, echando a perder grandes logros de un pequeño grupo de personas, quienes entre sus grandes logros fue exiliar a la policía estatal y federal. Resulta, que los empresarios, clase política, representantes de otros sectores, solicitaron al gobierno de Hidalgo, a restablecer el orden, reinstalar las instituciones y regresar a las policías, incluso el alcalde ofreció espacios para dichas comandancias.
En corto:
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Aprovecho este espacio, para solidarizarme con el presidente municipal de Santiago de Anaya, Jorge Aldana Camargo, por la irreparable pérdida de su señora madre, deseándole pronta resignación.
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Esta semana, se ha dado a conocer que será presentado el enlace especial del Gobernador en Ixmiquilpan, cargo que ocuparía el excandidato del PAN a diputado federal, Odilón Olguín.
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