• El Mandatario fue objeto de fuertes críticas después de que dijera que condenaba “el odio y el fanatismo por múltiples partes”, y no se refiriera en específico a los supremacistas blancos.
Miles de personas en Washington D.C. y en la Ciudad de Nueva York protestaron ayer contra la ambigua condena del Presidente Donald Trump a la violencia que se desató ayer en una protesta de supremacistas blancos en Virginia.
El Mandatario fue objeto de fuertes críticas después de que dijera que condenaba “el odio y el fanatismo por múltiples partes”, y no se refiriera en específico a los supremacistas blancos.
La ciudad fue sede de violentos choques por una marcha de supremacistas blancos. Estos protestaban por la retirada de una estatua en el centro de Charlottesville del general confederado Robert E. Lee, considerado un símbolo de la defensa de la esclavitud y el racismo.
Posteriormente, un conductor embistió a un grupo de opositores a la marcha racista, lo que dejó un muerto y una veintena de heridos.
Además, dos agentes de la Policía estatal de Virginia fallecieron tras estrellarse el helicóptero en el que viajaban y que estaba ayudando en las labores de vigilancia para proteger la seguridad en la ciudad.
En Washington D.C., miles de manifestantes se reunieron frente a la Casa Blanca antes de emprender una marcha que los llevó al Trump International Hotel.