Por el derecho a existir
Un ejercicio piloto de presupuesto participativo se está gestando en la comunidad indígena de Santa Ana Tzacuala en el municipio de Acaxochitlán, Hidalgo. La intención es generar procesos deliberativos en el que la comunidad participe desde las formas propias de su organización en la toma de decisiones.
En un trabajo colectivo y de acuerdo a las atribuciones legales, el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo, la Asociación Civil Ollin, jóvenes en movimiento, así como la Presidencia Municipal, firmaron un Convenio de colaboración, conducente a la implementación del proyecto.
De lo anterior, destaca la relevancia de focalizar una comunidad indígena como el espacio en el que se desarrolle una metodología de democracia participativa, que apenas alcanza a estar regulada en la Ley Orgánica Municipal. Sin embargo, representa una oportunidad para que las comunidades indígenas ante la ausencia de transferencias directas de recursos, ejerzan la potestad de autonomía e independencia a la cual tienen derecho a partir del artículo segundo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
En este tenor, los trabajos para el éxito de este pilotaje y que se convierta en un modelo a replicar, radica entre otros elementos, en la no intervención de factores ajenos a la comunidad, como son los intereses partidarios que podrían desvirtuar un ejercicio que se pretende sea culturalmente adecuado.
Paréntesis, sobre la pertinencia cultural, falta mucho a las instituciones gubernamentales, para desmontar prácticas folclóricas y de victimización a las comunidades para entenderlas desde la posibilidad de agencia, así como el respeto a sus decisiones, sin que intervengan las nociones occidentales de desarrollo.
En este tenor, es preciso señalar que las traducciones e interpretaciones a las diversas lenguas indígenas, es un pequeño paso de interculturalidad, que no garantiza en sí mismos el objetivo de informar. Es necesario, por lo tanto, implementar mecanismos de comprensión de las distintas formas comunitarias de organización, además de establecer elementos de flexibilización de procesos para personas indígenas frente a cualquier acto en las instituciones.
Por ello, con miras a un proyecto piloto exitoso de participación ciudadana, se brindarán elementos importantes de tratamiento intercultural, para la adopción en el actuar cotidiano de los espacios gubernamentales, el primero de ellos, respetar la cosmogonía indígena, reconocer la agencia en la toma de decisiones de la comunidad e imbricar el derecho a ejercer derechos.
