Entre 15 y 20 litros por automóvil, son los que puede comprar cada conductor.
El día de hoy en la capital hidalguense, distintas gasolineras comenzaron con la racionalización de las ventas de combustible, lo anterior ante las compras de pánico que se suscitaron en los pasados días, mismas en las que los clientes compraban no sólo lo que ocupaban para llenar el tanque, sino que se llevaban para almacenar.
En expendios como el ubicado junto al Parque de la Familia, en Avenida Juárez, las filas de automovilistas que buscaban carburante, alcanzaron varias cuadras atrás, por lo que con un marcador comenzaron a señalar los automóviles a fin de que no se metieran otros en la fila, y se les comenzó a decir que lo máximo que se les iba a despachar eran 15 litros, en tanto en otras gasolineras ubicadas en colonias como Bosque del Peñar, el máximo era de 20 litros.
Algunos de los vendedores explicaron que la forma de racionalizar la venta era conforme a las necesidades del cliente a fin de que el combustible se hiciera rendir para la mayor parte de población, por lo que a los automóviles que llegaban con el marcador en ceros o con la misma reserva se les apoyaba hasta con 20 litros, no así a los que sí tenían combustible en sus automóviles y que sólo buscaban llenarlos.
De igual forma la venta en garrafón, no podía exceder los cinco litros por cliente, en tanto el abasto a gasolineras se ha dado, aunque mientras unas reciben combustible, en otras se agota. Sin embargo la capital hidalguense no ha llegado al desabasto total, a pesar de que en las estaciones de servicios donde hay gasolina las prolongadas filas de automovilistas no se han hecho esperar.
Cabe destacar que las autoridades han informado desde el Gobierno Federal, que no hay falta de combustible, por lo que continúa la campaña mediante la cual reiteran a la población a que no hagan compras de pánico, ya que estas podrían ser las que originen una escasez mayor de carburante en la entidad.