Lisset Marcelino Tovar, diputada local de la fracción del Partido del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), en la 65 Legislatura, propuso una iniciativa con la que busca sancionar a los diputados que rebasen el tiempo estipulado por la ley para la resolución de los asuntos que les sean turnados a la comisión que presidan. 

Lo anterior en la búsqueda de que no se queden iniciativas en la congeladora, no se rezague el trabajo y que los legisladores trabajen realmente en lo que deben hacer como legisladores, ya que no es una la comisión en la que el trabajo se ha vuelto lento y repercute en que no hay respuestas a la ciudadanía, según explicó la diputada morenista. 

“Se debe desahogar el trabajo, principalmente de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales pues, debido al diseño de control político concentra la mayor de las facultades al limitar que otras comisiones puedan analizar y dictaminar las iniciativas de creación, reformas o adiciones a las leyes locales, incluso cuando por el tema son competentes a resolver”, dijo.

Y agregó que si  dicha comisión se queja por la carga de trabajo, se dé trámite preferente a esta iniciativa para que sean todas las comisiones que, de acuerdo a la temática, resuelvan las iniciativas que les sean turnadas y se sancione económicamente a las y los presidentes que por ineptitud u omisión, retrasen los plazos establecidos en la ley para resolución de los asuntos.

Cabe destacar que han sido varias las legislaturas y grupos parlamentarios que  presumen una alta producción de iniciativas; sin embargo, al momento de sacar las cuentas de cuántas fueron dictaminadas, las cifras los dejan mal parados, las iniciativas se quedan sin dictamen y para “limpiar” todo el asunto y lavarse las manos, discretamente los diputados retiras las iniciativas como si nunca las hubieran propuesto.