Todo inició por un desacuerdo entre transportistas, convirtiéndose en una verdadera persecución policiaca en las principales vías de este municipio.
Fue alrededor de las 18:00 horas, cuando el chofer del taxi de la unidad 222 con otros ruleteros de la ruta Chalahuiyapa, empezaron a discutir en la base de las combis y posteriormente sus compañeros se unieron a la riña, por lo cual, uno de chofer de la unidad de taxi 122 para defenderlo atropelló al checador de las combis de nombre Mauro “F” “M”, de 44 años e inmediatamente se lo llevaron al hospital para darle atención médica.
Ante los hechos suscitados, el responsable se dio a la fuga y como represalia, los amigos del lesionado se llevaron sin permiso el taxi 222 con el fin de llevarlo hasta su comunidad y mantenerlo retenido, para castigar al responsable que dañó a su compañero.
Fue aquí cuando comenzó la persecución donde participó la Policía Estatal, Municipal y Guardia Nacional.
Fue cerca del 84° Batallón de Infantería, donde la unidad del servicio público se volcó y cayó en una zanja, quedando destrozada.
Acto seguido, los tripulantes fueron detenidos por policías municipales y llevados a la comandancia, mientras que el taxi en mención tardó varias horas en el lugar donde se volcó, debido a que no dejaban los choferes de Chalahuiyapa que lo remolcaran.
Esta actitud provocó que los taxistas bloquearan ese tramo por un buen lapso de tiempo, creando caos en el lugar.
Pasadas las horas, representantes de combis y taxistas lograron llegar a un acuerdo donde se cubrirían las lesiones del checador y los daños al taxi y sólo de esta manera fue como se pudo arreglar el problema y trasladar la unidad al corralón.