
Durante una entrevista en el programa “Al Aire” el secretario de Salud, Efraín Benítez Herrera, expresó, sobre el Plan Integral contra la contaminación en Tula: “el gobernador cuando hablaba de este proyecto integral es que la megalópolis; específicamente algunos municipios del estado de México y la ciudad de México; participen en una especie de pago de deuda que se tiene con el estado de Hidalgo”.
Detalló que Hidalgo es unos de los principales proveedores de agua limpia, pura y cristalina al Valle de México: “Hidalgo provee agua limpia y nos regresan agua también, pero agua residual, aguas negras, aguas altamente contaminadas no nada más con materias fecales, sino también con otra serie de sustancias tóxicas”.
Especificó: “el programa integral que habla el gobernador es hacer otras represas, hacer varias plantas tratadoras de agua; no una, sino varias; con el objeto de que el agua que llega a Hidalgo pueda, en un momento dado, inyectarse a los mantos freáticos y además utilizarse para el riego de los cultivos” pues señaló que en la zona del Valle del Mezquital todos los cultivos son regados con aguas negras: “eso verdaderamente es algo que a nosotros nos lastima”.
Manifestó que lo sucedido en Tula es algo triste y lamentable: “por eso el gobernador ha sido empático en este plan integral que debe ser unos de los principales legados de la administración del licenciado Fayad: dejar las bases sentadas para que futuros gobiernos, tanto del estado de Hidalgo como del Estado de México y la Ciudad de México se preocupen por la ecología”.
Agregó, respecto a las inundaciones, que la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) dijo que eran atípicas, y señaló que al igual que la pandemia era una de las formas de la naturaleza de decir lo lastimada que se encuentra: “lo mal que hemos hecho de no cuidar nuestro hábitat y cómo hemos, de alguna manera dañado y lastimado el sitio donde vivimos, el sitio donde comemos en algo verdaderamente triste”.