ALFIL NEGRO
Seguramente muchos recordamos un programa de televisión con el ahora difunto Héctor Suárez que se llamó ¿QUÉ NOS PASA? Por el año 1985, en el que con humorismo serio, para llamarlo de alguna manera ,se cuestionaban situaciones que no tenían lógica y que atentaban contra el orden y los derechos ciudadanos, simplemente por hacerlo, con una explicación que hablaba del desbarajuste mental de la sociedad, pues se daba como explicación a la pregunta de ¿por qué se hacían esos actos?, la respuesta era: “POS NOMÁS”, que respondía y explicaba todo y nada al mismo tiempo.
En este momento nuestro país vive una situación a la que le viene como “anillo al dedo” como dice el dueño de la palabra el “qué nos pasa?, porque las cosas sobre todo en violencia parecen un laberinto sin salida.
QUÉ NOS PASA, cuando en el altar sagrado de la iglesia de Cerocahui del municipio de Urique en Chihuahua, un sicario asesina a dos sacerdotes jesuitas, que eran ejemplo de servicio a los pobres entre los pobres, y el Presidente de México en lugar de actuar para aclarar las cosas y responder a la exigencia de la iglesia para frenar la violencia, acusa a los religiosos de estar apergollados por la oligarquía en su estilo de encontrar siempre culpables de lo qué pasa, sin darle la cara a los problemas.
QUÉ NOS PASA cuando nuestros soldados son humillados por los delincuentes, sin que se puedan defender porque la línea es darles abrazos no balazos.
QUE NOS PASA, cuando se hace escándalo por el hijo del Presidente, además con razón, y se calla ante la situación de abandono e irresponsabilidad con miles de niños sin medicinas ni apoyos ,porque se decidió frenar los apoyos nomás porque sí.
QUÉ NOS PASA, cuando en Puebla niños y familiares que esperaban ser vacunados son baleados por criminales que luego se dan a la fuga.
QUÉ NOS PASA, con tantos secuestrados y luego asesinados como en Yucatán, o en otros estados sin que se mueva o se renueve la estrategia de seguridad.
QUÉ NOS PASA, con los feminicidios sin que se note una decisión real y actuante para frenar este mal.
QUÉ NOS PASA, con tanto político ambicioso y deshonesto que sólo busca el poder por los negocios y el dinero.
Y así un largo QUÉ NOS PASA, en casi todos los órdenes de la vida, en que sobran los negociantes y vivos que son verdaderos lobos con piel de oveja. Y lo peor es que no se ve la salida.
