Esos sueños 

Hoy no despertarás, te quedas atrapado en el tormento de tus sueños, esos que te traen recuerdos y te hacen llorar y despertar en plena madrugada, sin embargo como te lo he dicho antes, hoy no despertarás. Quiero verte  atrapado en una venus, ver como sudas al sentir como se cierra su trampa, como pataleas sin remedio y como resbalas profundamente hasta encontrarte en la habitación donde tantas veces fue tuya, en el mismo lugar donde todo terminó, en dónde te quedaste sin su aroma, sin su calor. 

Ya te lo he dicho, ¿Por qué te aferras?, no vas a despertar, esta fiesta, tu fiesta, apenas comienza, todavía no llegamos al salón dónde te encontrarás con el cuerpo inerte de tu madre y el rostro de rojas pupilas que tu padre mostraba al estrangularla, ¿lo recuerdas? ¿Cuántas veces soñaste eso, cuando niño? pero antes, vayamos al jardín ese que te causa el más profundo dolor, puedes mirar las tulipanes antes de sentir la angustia que provoca la necesidad de correr mientras te hundes en el fango… 

No, ya te he dicho que no, que está vez aquí te quedarás, en vano que me ruegues, en vano que implores, no puedes escapar… ¿Sigues con esa necedad? ¿En verdad crees que soy yo el que te provoca todo esto? ¿Cómo se siente que te trituren los huesos esas máquinas? no importa cuánto sangres, no morirás, aquí no, sólo debes sentir tu muerte una y otra vez, ¿no sabes dónde estás?

El que escribió esto fuiste tú, y el único que causa todo ese dolor eres tú, ¿Por qué me suplicas a mí? no recuerdas esta voz, es la tuya, tu eres el que se está hablando, ¡Mírame! ¿Acaso crees que yo he sufrido menos? No, yo ya me voy, tu me mataste, ahora quédate en tu realidad esa que creaste en todos estos años, yo, me iré a descansar…