Diputados acuerdan un ‘pacto de civilidad’ para evitar agresiones en la Cámara
Hay otra cuestión que habla de la tribuna: si queremos poner mantas, si queremos hacer señalamientos, lo vamos a hacer en el tiempo en que esté el partido en tribuna; entonces, eso ya está estipulado, así es” dijo Marko Cortés. “Que no confundan servilismo con nuestra obligación”.
Los diputados quieren evitar espectáculos como el del pasado 1 de septiembre cuando un enfrentamiento entre legisladores de varios partidos por la llegada de Donald Trump al país, terminó en empujones y golpes. O peor aún, espectáculos como el de aquella mañana de septiembre de 2006 cuando Felipe Calderón tomó posesión de su cargo entre patadas, puñetazos y escupitajos.
Los coordinadores de las ocho partidos con representación en la Cámara de Diputados suscribieron un ‘pacto de civilidad’ para evitar manotazos, golpes y jaloneos durante los debates en el pleno, aunque ello signifique renunciar a las protestas con mantas y pancartas en la tribuna del recinto.
Los jefes de partido autorizaron a que el presidente de la cámara pueda levantar la sesión en caso de conato de bronca. Las “reglas de convivencia” pactadas pretenden garantizar el derecho de los legisladores a expresarse con absoluta libertad, sin ser objeto de agresiones o injurias.
“No queremos más espectáculos como el que vimos del PRIVerde contra el Movimiento de Regeneración (Morena) el 1 de septiembre; no merece eso el Congreso. Lo que buscamos es que el Congreso mexicano esté a la altura de lo que merece el país y que queremos que vea el mundo”, dijo el conservador Marko Cortés.