Bajo Reserva Exprés
El PRI tiene un nuevo problema llamado Tarek Abdalá.
Don Tarek, quien fuera tesorero del prófugo gobernador con licencia de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, muy probablemente será expulsado del PRI.
Pero el problema, nos dicen, es que debido a que el diputado goza de fuero, éste puede seguir legislando, pues para desaforarlo se requiere la solicitud de la Procuraduría General de la República, ya que la sanción de la Contraloría de Veracruz, de inhabilitarlo 10 años por el desvío de más de 300 millones de pesos de la federación a las arcas estatales, no le impide seguir desempeñando su cargo.
Esta situación, temen en el partido, le abre a Abdalá un tiempo que podría utilizar para hacer las maletas y seguir los pasos de Duarte para desaparecer.
El problema no es cualquier cosa, pues mientras el PAN puede presumir que su gobernador acusado de actos de corrupción y delincuencia organizada se entregó a la justicia, el PRI tendrá dos prófugos.