Estimados Amigos, con el gusto de siempre, saludándolos desde este espacio de Plaza Juárez. Apenas hace ocho días se cumplió el año de la trágica muerte de Víctor Barrio, en Teruel, España, y nuevamente la Fiesta Brava viste luto. El pasado sábado, en la localidad francesa de Aire-sur-l’Adour, un toro de Baltazar Iban le pegó tremenda cornada al torero Vasco Iván Fandiño, que dada la magnitud de la herida debió ser trasladado a Mont de Marsan, distante a treinta kilómetros, recorrido que lleva casi media hora.
Fandiño alternaba con el francés Thomas Dufau y su compatriota Juan Del Alamo en la lidia de reses españolas de Baltasar Iban. En su primero, que se abrió plaza, Iván realizó una faena con su personal sello, gustándose con el capote, con la muleta instrumentó un trasteo riñonudo a un toro, que si bien tuvo buen estilo, exigió al torero vasco, que le ligó muletazos de buena factura por ambos pitones, para concluir con una estocada entera, un tanto trasera, que fue suficiente para pasaportar al astado, por lo que se le otorgó una bien merecida oreja.
En tercer lugar saltó a la arena “Provechito”, primero del lote de Juan Del Álamo, en el turno de quites Fandiño citó para torear por chicuelinas, ejecutó la primera con limpieza el toro quedó corto a la salida del capote, quedando un tanto descuadrado el torero. El toro embistió nuevamente la capa de Iván que pretendió vaciar con el capote la acometida del astado que, sin hacer caso del engaño, arrolló al torero que giró en el aire y al caer perdió piso. Ya en la arena el burel hizo por él metiendo el pitón por el costado derecho del torero. El daño ya estaba hecho: el asta del Baltasar Iban causó destrozos en pulmón y riñón derecho, colapsando el hígado y seccionando la vena cava, lesiones mortales por necesidad. Iván Fandiño Barros se había encontrado con su destino.
De acuerdo a informes proporcionados por el doctor Mathieu Poirier, Jefe de Servicios y portavoz del Hospital Layné de Mont de Marsan, “el torero presentaba en el abdomen tres litros y medio de sangre negra, proveniente de las glándulas hepáticas, señal de que el hígado había reventado a causa de la cornada, que también rompió la vena cava, lo que le produjo un severo derrame interno. No se pudo hacer nada por salvarlo’.
Iván Fandiño nació en Orduña, Vizcaya el 29 de septiembre de 1980, se aficionó a la fiesta brava, coincidentemente con Víctor Barrio, ya pasada la adolescencia, después de haber se aficionó a los toros después de haber destacado como pelotari.
Su debut de luces fue en Llodio, Álava, el 16 de agosto de 1999, después de una difícil campaña por tierras levantinas y andaluzas volvió a su ciudad natal para debutar con picadores el 02 de junio de 2002, actuando con Julien Lescarret e Iker Javier Lara en la lidia de novillos de Javier Pérez Tabernero, esa tarde cortó tres orejas.
Actuando en capeas en la Provincia de Guadalajara y conoció a Néstor García, y al lado de este su carrera dio un giro en contratos y preparación, que lo llevaría a la presentación en Madrid, el 12 de septiembre de 2.004 junto a Manuel Barea “El Arqueño” y el colombiano Héctor José para lidiar astados de Navalrosal. Al novillo de su debut, “Risueño”, número 40, de 453 kilos, le cortó una oreja.
Al año siguiente Julián López “El Juli” le concede la alternativa en Aste Nagusia, Bilbao, el 25 de agosto, al cederle el toro “Afrodisiaco”, número 64, castaño, de 517 kilos, de la ganadería de El Ventorrillo, con Salvador Vega como testigo. En 2007 cortó una oreja en esta misma plaza a un toro de El Ventorrillo pero fue en 2009 cuando su nombre empieza a sonar fuerte, después de cortar una, oreja en Bilbao, a un toro de La Quinta, y dejar ambiente en su confirmación de alternativa, durante la Feria de San Isidro, el 12 de mayo, siendo Antonio Ferrera el padrino y Morenito de Aranda testigo, con el toro “Catalán”, número 210, castaño, de 545 kg y de la ganadería de “La Dehesilla“. Por su buena actuación torea una nueva fecha, en esa misma feria, para lidiar la corrida de Victorino Martín, otra actuación más en el mes de junio, con un encierro de José Ignacio Charro, en el que da una vuelta al ruedo que le vale su presencia en la Feria de Otoño, con una corrida de Palha.
La vida taurina de Iván Fandiño estuvo lejos de ser fácil, torero valiente y honrado salió todas las tardes a jugarse la vida, consiguiendo colgar el cartel de “no hay billetes” en la mismísima Plaza de Toros de Las Ventas del Espíritu Santo, el Domingo de Ramos del 2015, cuando hizo la hombrada de lidiar en solitario toros de los seis hierros más “duros”, procedentes de Palha, Partido de Resina, Victorino Martín, Cebada Gago, Josè Escolar y Adolfo Martín, tarde en la que si bien no logró el triunfo por poca colaboración de los astados, demostró su valía como hombre y como torero, aunque causó la decepción de algunos que esperaban que ese día lo matara un toro. Finalmente, el pasado sábado, les cumplió a sus detractores,
Como ya lo hemos expresado, sólo los Dioses no mueren y los toreros nada más son Semidioses.
Por ahí nos vemos ENTRE EL CALLEJÓN Y EL TENDIDO si Dios lo permite.
