ALFIL NEGRO
Nuevamente el municipio de CUAUTEPEC, el rey del huachicoleo, da de qué hablar en este tema, pues en la comunidad de LA ESTACIÓN personas que se supone son del municipio, agredieron con armas de fuego y lo que encontraron a personal de PEMEX y del ejército, que reparaban una fuga de combustible calificada de grave y que obligó a parar el transporte y cerrar escuelas y comercios.
No es la primera vez que se da un hecho de esta naturaleza en este municipio, calificado como el que tiene más robo de gasolina en el estado, en una actitud que responde a los beneficios que les deja a los pobladores y a los responsables del robo.
143 MILLONES GANARON HUACHICOLEROS EN 2022 EN CUAUTEPEC
y no se crea que las ganancias de los roba combustibles en ese municipio son cacahuates, pues de acuerdo a la información que se dio en reciente reunión del gabinete de seguridad, se robaron tan sólo en el 2022 algo así como 90 mil 154 barriles que en litros son 14 millones 334 mil 486, que si los venden a 10 pesos el litro las ganancias son de 143 millones 344 mil 860 pesos.
Un dineral, sin duda.
Con toda seguridad como sucedió en PALMARITO, municipio poblano, y parte de TRIÁNGULO ROJO, las ganancias en dinero para buena parte de la población son muchas, de tal manera que llegan a considerar el robo de combustible como un trabajo normal, hasta el grado de que en ese municipio de Puebla metido al huachicoleo, cuando ejército llegó y puso orden, los habitantes cerraron la carretera que va a Tehuacán con mantas que decían “DÉJENNOS TRABAJAR”, que se podía traducir por “Déjennos robar”, que era la actividad a la que se referían.
En ese municipio se hablaba de que a los jovencitos conocidos como halcones, porque eran los que avisaban cuando llegaban policías para revisar la situación o cuando llegaba el ejército para revisar los ductos de PEMEX, avisaban de su llegada, les pagaban más de 10 mil pesos al mes, lo que en ninguna parte iban a ganar, y ni se diga los pagos que les hacían a los adultos inmiscuidos en trabajos de acarreo, perforación, envasado o venta de lo robado.
Con toda razón se decía en Tecamachalco, municipio principal de esa región, que cuando llegaban a los antros los jovencitos del triángulo rojo tenían dinero de sobra para lucirlo ante todos.
Finalmente se puso orden y muchos de los metidos en esto, ahora están en la cárcel con más de un alcalde o ex alcalde en el tambo.
Lo qué pasó en CUAUTEPEC hace unas horas no sólo atenta contra un bien de la nación, sino que expone de manera grave a la población por todo lo que puede pasar en estas situaciones, y de lo que es un ejemplo lo pasado en TLAHUELILPAN el 18 de enero del 2019, con un saldo de 137 fallecidos.
Algo se tiene que hacer para detener el robo de combustibles, ya se demostró que cuando se quiere se puede, como sucedió en los municipios del TRIÁNGULO ROJO de Puebla.
Se frenaría un delito y se daría seguridad a la población.
Veremos.
