Primeras horas del paro cívico
• “No somos ultraderecha, somos venezolanos enojados”
Las personas caminaban por toda la ciudad porque los autobuses del transporte público se unieron al paro, sólo trabajó el Metro de Caracas, administrado por el Gobierno. Sin embargo, los vagones estaban vacíos. “Aquí no abrimos porque los trabajadores no llegaron. Ni una sola tienda”, aseguró José, un vigilante en un centro comercial de la zona. En otros centros comerciales del este solo pocas tiendas abrieron.Pero en el oeste de la ciudad, la situación era normal.
Varias zonas de Caracas apoyaron ayer la llamada al paro cívico nacional de 24 horas convocado por la oposición venezolana, especialmente en el este de la ciudad, donde apenas algunas cafeterías y los bancos abrieron.
La ciudad tenía rostro de zona de conflicto: muchos comercios cerrados, las calles con muy poca gente, montañas de basura -algunas prendidas en fuego- y barricadas bloqueaban el paso.
Jóvenes encapuchados con botellas llena de gasolina amenazaban a quienes en motocicletas o carros intentaban superar las barricadas. La zona era intransitable.”Éxito del paro en Caracas se evidencia en la cuenta del @metro_caracas: fotos de andenes vacíos y reconocen que el transporte se sumó al paro”, expresó en Twitter Freddy Guevara, vicepresidente del Parlamento, de mayoría opositora.
“Este paro es un éxito. Estamos aquí, trancando calles, por culpa del presidente Nicolás Maduro. Le pedimos a ese payaso que se vaya. Si no, vamos a incrementar la protesta hasta que se vaya. Este paro se puede prolongar mucho más. No somos ultraderecha, somos venezolanos cansados.
A mí me ha tocado hasta buscar comida en la basura”, dijo Jorge Mora, quien bloqueó con escombros una calle en Chacao (este). Mora no vive en ese acomodado barrio: su ropa estaba sucia y sus zapatos rotos, sin embargo protestaba junto con los vecinos de la zona.
En Sabana Grande, boulevard comercial del este de la ciudad, la mayoría de los comercios también cerraron, sólo abrieron algunos de comida y otros de ropa.