Lol Canul, psicóloga y activista independiente, expresó que en México no hay “ninguna vigilancia epidemiológica en cuanto a salud mental” y que es una de las exigencias que movimientos por la salud mental ya han señalado. 

Lo anterior fue comentado en la conferencia virtual de la publicación de resultados de la encuesta “¿Te vacunarías contra el covid-19?” dirigida a adolescentes hidalguenses, en las redes del Movimiento de mujeres jóvenes para las juventudes (Movimiento XD)

Indicó  “es muy triste que no podamos conocer cuál es la situación de la salud mental de nuestros adolescentes y tenemos que remitirnos a otras organizaciones, como la UNICEF (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia)”. 

Especificó que este organismo buscó abrir el diálogo, registrar y potenciar la voz de los adolescentes a través de un sondeo que se realizó a casi nueve mil personas de este sector.

Dijo que los resultados arrojaron que tres de cada cuatro adolescentes sintieron la necesidad de pedir ayuda, y a pesar de sentir esa necesidad, dos de cada cinco no tuvieron a quién recurrir para solicitarla: “eso nos habla del entorno que viven nuestros adolescentes”. 

Señaló que se debe poner atención a los efectos del aislamiento social: “hay diferentes estudios e investigación clínica que nos indican cuáles pueden ser y aunado a eso hay que enfrentarnos a un mundo en el que hay secuelas de COVID asociadas con salud mental; las personas están teniendo problemas de atención, depresión, estrés, ansiedad y son temas que deberían estar atendiendo”.

Por lo anterior, pidió al sector salud que se ponga atención a esto, pues puntualizó que la depresión, la ansiedad y el estrés son los principales discapacitantes en tema de salud mental a nivel mundial: “No son un tema que deban dejarse de lado”. 

Afirmó que la adolescencia es una etapa en la que es necesario el apoyo y los vínculos afectivos, pero por el distanciamiento social estos se han coartado, aunque el crecimiento de fenómenos como Tik Tok han generado una forma de interacción social, pero hay personas que no pueden acceder a los dispositivos y otras que no cuentan con supervisión adulta en el uso de estas redes. 

“Es muy triste que no podamos conocer cuál es la situación de la salud mental de nuestros adolescentes”