Este museo pretende reconstruir la experiencia de un hombre formado en un tiempo de grandes movilizaciones sociales, modelado por un proceso revolucionario del que fue a la vez productor y actor
El Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Hidalgo (Cecultah) pone a la disposición del pueblo hidalguense un recinto más para la preservación de la historia de nuestra entidad y recordar a uno de sus personajes fundamentales: el Museo Felipe Ángeles, ubicado en el municipio de Zacualtipán, en lo que fuera la casa donde nació este general revolucionario.
Dicho recinto viene a fortalecer la Red Estatal de Museos del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Hidalgo, la cual se compone del Museo de Arqueología e Historia de Huichapan, el Museo de la Cultura Hñähñú en Ixmiquilpan y el Museo Regional de la Sierra Alta en Zacualtipán.
Este museo pretende reconstruir la experiencia de un hombre formado en un tiempo de grandes movilizaciones sociales, modelado por un proceso revolucionario del que fue a la vez productor y actor, que creció en un país convulsionado que exigía una toma de posición frente a las demandas históricas de tierra y ejercicio de derechos, pero también de venganza y violencia, de solidaridad y de paz.
Durante su vida, el General Felipe Ángeles tuvo que enfrentar situaciones adversas y pagó las consecuencias de decisiones tales como denunciar la corrupción, defender valores como la educación, la democracia y la justicia y oponerse a denigrar a sus adversarios, porque ambicionaba un porvenir digno para su país.
Sin embargo, el general Ángeles fue un hombre de carne y hueso, apasionado, de pronto rencoroso, con un hablar directo que le ocasionó la enemistad de muchos de sus compañeros, que amó profundamente, que dudó y que soñó, de la misma manera que cualquier ser humano.
Este museo cuenta la historia del General Felipe Ángeles, con la invitación a que se reflexione en la historia de cada uno, para que los usuarios construyan puentes entre el pasado y su presente y a que descubran el poder de sus acciones para modelar el futuro.
Este museo no es tradicional. No se compone de objetos: resguarda el conocimiento y la historia de este gran personaje revolucionario vistos desde varios periodos: 1908-1911, cuando el Partido Antirreeleccionista postula a Francisco I Madero a la presidencia de México; 1912-1913, cuando Francisco I Madero gana las elecciones extraordinarias en 1911, pero no logra terminar con el poder de los partidos de Porfirio Díaz; 1915-1916, la etapa más violenta del movimiento revolucionario.
En cada una de sus tres salas se conocerán aspectos diferentes de la vida de Felipe Ángeles, hasta mostrar cómo fue visto en el país.
Para ambientar el museo fue necesario recurrir a diferentes archivos fotográficos. Así, vemos al general en diferentes etapas de su carrera militar. Se invirtió un presupuesto cercano a los 6 millones de pesos provenientes del gobierno federal, repartidos en la adquisición de la casa, la rehabilitación y equipamiento del recinto.