Home Deportiva Muere Kobe Bryant en trágico accidente aéreo

Muere Kobe Bryant en trágico accidente aéreo

0

LUTO EN EL DEPORTE INTERNACIONAL

    •    Lo acompañaba su hija Gianna Maria, de 13 años, y siete personas más; reconocidos deportistas recordaron al astro de la NBA a través de las redes sociales


Al final, perdió con la muerte el hombre que se tornó mito en el baloncesto por la obsesión que movió su vida: vencer.

En la búsqueda de tanta perfección Kobe Bryant resultó tan impredecible como enigmático y antipático para compañeros, rivales, hinchas y periodistas.

Cosechó amores, tempestades y odios, pero nadie resultó indiferente a su figura, ni osó formular crítica alguna a su forma muy física de jugar.

Nacido en Filadelfia hace 41 años, Kobe Bryant falleció ayer en un accidente aéreo ocurrido en una zona remota de la pequeña ciudad de Calabasas, unos 50 kilómetros al noroeste de Los Ángeles.

En principio se informó que le acompañaban cuatro personas más, pero horas después el alguacil del condado de Los Ángeles Alex Villanueva precisó que la lista de pasajeros y tripulación de la aeronave antes del despegue certificaba que en el helicóptero viajaban nueve personas.

La primera víctima mortal identificada al lado del ex baloncestista fue una de sus cuatro hijas, Gianna Maria, de 13 años, a quien Kobe y sus grandes amigos llamaban Gigi.

La tragedia ocurrió cuando los ocupantes de un helicóptero particular iban a una práctica a la Academia Mamba.

Bryant, uno de los astros de todos los tiempos de la NBA, abandonó el baloncesto cuatro años atrás y con ello dejó dos décadas de historia.

En su comienzo fue elegido en la primera ronda del ‘draft’ de 1996, ganó cinco veces el título de la NBA y en dos ocasiones lo eligieron MVP.

El equipo angelino le hizo un homenaje sin antecedentes al retirar los números 8 y 24 que lució en sus camisetas.

Impactados, figuras del deporte, no sólo del baloncesto, pararon para rendir homenaje a Bryant a través de las redes sociales.

Uno de los más grandes jugadores de la historia de la NBA y de Los Angeles Lakers, Kareem Abdul-Jabbar, rindió homenaje a su sucesor con un elogio emotivo de su condición personal.

Otro astro señalado por los expertos como decisivo en el crecimiento profesional de Kobe, Shaquille O’Neal, emocionó a sus seguidores con sus palabras de desconsuelo por la pérdida de su “sobrina Gigi”, su “amigo, hermano, socio”, y los otros ocupantes del helicóptero. “Te amo y siempre me harás falta”, escribió ‘Shaq’.

Horas después de esparcirse la noticia, Usain Bolt, el más grande velocista de la historia, dijo que no lo podía creer. Los argentinos Manu Ginóbili, Luis Scola y Diego Maradona se declararon “devastados” con la noticia.

Ginóbili, que brilló en los Spurs y tenía una gran relación con Bryant, que habían forjado en las épocas donde fueron rivales en los cruces entre San Antonio y Los Ángeles Lakers, escribió ‘Devastated’ (Devastado) en su cuenta de Twitter.

El último encuentro de ambos había sido en la semifinal y final del último Mundial en China, donde Kobe fue emblema y Manu uno de los invitados de honor.

El actual capitán de la selección Albiceleste subcampeona del mundo, Luis Scola, escribió desde Milán: “No lo puedo creer… Me siento igual de mal que si hubiera muerto alguien de mi familia”.

“Se van todos los buenos. Lamento también el fallecimiento de su hija y de los tripulantes del helicóptero. Hasta la vista, leyenda”, manifestó Diego Maradona en su cuenta de Instagram.

A estos nombres ilustres se sumaron estrellas de Hollywood y celebridades del mundo del espectáculo de Estados Unidos.

NUNCA DEJÓ DE AMAR EL BALONCESTO

Kobe Bryant, conocido como la ‘Mamba negra’, se convirtió en uno de los grandes iconos del baloncesto mundial gracias a su extraordinaria capacidad anotadora, su amor por el deporte y una arrolladora personalidad que llevó a Los Ángeles Lakers a volver a la cima y obtener cinco campeonatos de la NBA.

“Haré todo lo que tenga que hacer para ganar partidos, sea sentarme en el banquillo agitando la toalla, darle un vaso de agua a un compañero o anotar el tiro definitivo para ganar el partido”, indicó en una ocasión al explicar su voracidad y ambición.

Se le conocía como ‘Mamba negra’ precisamente por su voluntad ganadora que no tenía límites. Muchos creen que nació con una pelota de baloncesto.

Hijo de Joe Bryant, también jugador de la NBA, se mudó a los seis años a Italia donde su padre jugó entre 1984 y 1991 en diversos clubes.

Aprendió a hablar con fluidez el italiano y desarrolló una pasión por el fútbol, que mantendría el resto de su vida como seguidor de F.C. Barcelona y el brasileño Ronaldinho Gaúcho.

Tras regresar a EE.UU. en 1991, comenzó a jugar en el equipo de su instituto en las afueras de Filadelfia (Pensilvania) donde se consolidó como una de las jóvenes estrellas en ascenso.

Tradicionalmente los jugadores de instituto pasaban por la liga universitaria donde buscan consolidar su talento y experiencia, pero Bryant dio muestras de su precoz voracidad al saltar de manera directa a la NBA en 1996 con apenas 18 años.

“Si tienes miedo al fracaso, entonces probablemente vas a fracasar”, solía asegurar. El resto, como se suele decir, es historia.

Conquistó cinco anillos de campeón de la NBA, los tres primeros junto a Shaquille O’Neal y los dos últimos con el español Pau Gasol, en 2009 y 2010.

Cuando Gasol dejó Los Ángeles para proseguir su carrera con los Chicago Bulls reconoció “lo mucho que echaba de menos” a Bryant.

“Echo de menos su presencia. Echo de menos su actitud. No hay muchos jugadores que lo tengan”, dijo de su ex compañero.

Tras retirarse, rápidamente presentó su propio fondo de inversiones centrado en los sectores de tecnología, medios de comunicación y datos.

Asimismo, en 2018 compitió por el Óscar al mejor cortometraje animado con ‘Dear Basketball’, basado en un poema que escribió a su amado deporte.

Kobe está considerado como uno de los mejores jugadores de la NBA de todos los tiempos, ya que ha formado parte 18 veces del equipo de las estrellas durante sus 20 años de carrera con los Lakers.

Obtuvo, además, dos medallas de oro con la selección de EEUU en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y Londres en 2012.