El director general de comunicaciones de la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (SOPOT), Oswaldo Rodríguez Fernández, expresó que la estatua de Miguel Hidalgo estuvo “debidamente protegida” por lo que no necesitó ninguna restauración durante el tiempo que se resguardó este “monumento emblemático” que ahora llegará a medir un total de 28 metros, en los que aproximadamente 14 son únicamente de la base, con un peso de 114 toneladas. 

Explicó que se prevé que el proceso dure dos horas, pues no será tan laborioso como en el trabajo que se hizo para bajarla: “ahora nada más fue levantarlo, aproximarlo a su punto y bajarlo, no va a haber maniobra de subirlo otra vez en el puente como la vez pasada, va a ser mucho más rápido, mucho más ágil”. 

Alrededor de las 22 horas la zona fue acordonada, y a las 23 las obras continuaban para asegurar el monumento y evitar que al subirlo se generara un accidente. Alrededor de las 2:15 horas concluyó la colocación de la estatua de Miguel Hidalgo y Costilla en la Supervía Colosio.