Home Nuestra Palabra Javier Peralta Mirar a AMLO sin velos panistas

Mirar a AMLO sin velos panistas

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RETRATOS HABLADOS

Cada día es más complicado entender lo sucedido con los Estados Unidos de Norteamérica, porque en términos reales nadie sabe a detalle en qué consistieron los acuerdos con esa nación para impedir la aplicación de 5 por ciento de impuestos (aranceles) a cada uno de los productos que exportamos. Lo único cierto es que un Presidente como Donald Trump, puede cambiar de opinión en cualquier momento y dar marcha atrás en la cancelación por tiempo indefinido de cobrar a México si no detiene la emigración centroamericana-cubana-africana y de todos los que se apuntaron a la política de puertas abiertas que se había aplicado por parte de nuestra nación.
    Solo hay dos versiones de los hechos: la de la Casa Blanca que avisa informará pormenores del acuerdo cuando sea necesario, y del gobierno mexicano. Las demás que hoy desenfundan sus armas, por ejemplo patéticos ex secretarios de Relaciones Exteriores como Jorge Castañeda, en la época más indigna de esa oficina en el gobierno Foxista, y que califican al Presidente mexicano como un estúpido, por su mismo origen no tienen ninguna credibilidad.
    Sorprende que ex funcionarios de gobiernos panistas, de pronto se erijan como jueces supremos, como si tuvieran la calidad moral suficiente para hacerlo, y de nueva cuenta se olviden los sexenios desastrosos de Fox y Calderón que sumieron al país en una espiral de violencia que hoy mismo es el problema más grave de nuestra nación. Los dos ex presidentes parecen vivir en una realidad alterna donde sus administraciones resultaron todo un éxito, y no el fracaso absoluto en que desembocaron.
    Por lo menos el priísmo ha tenido la congruencia mental de abstenerse de condenas, y centrarse en la tarea titánica de evitar su desaparición por los errores cometidos.
    No abogamos porque la gestión del Presidente López Obrador pueda considerarse de estos momentos un éxito absoluto en comparación con sus antecesores, por la simple y sencilla razón de que es muy poco el tiempo que lleva en el poder, lo que impide tener un veredicto claro a favor o en contra.
    Lo cierto es que de haberse aplicado el 5 por ciento de aranceles a productos mexicanos a partir de hoy, hubiera tenido un impacto devastador en la economía nuestra, y su suspensión aparentemente por tiempo indefinido, es un respiro no solo para la administración Obradorista, sino para todos los que habitamos este país al sur de los gringos.
    Si hubo errores por parte del gobierno Morenista, al presentar el territorio mexicano como un santuario para los migrantes, lo que alentó una emigración masiva que de ninguna manera es fruto de la generación espontánea, sino con una mafia internacional que impulsa estas acciones, tendrá que juzgarse a la luz del tiempo necesario para esta evaluación.
    Es evidente sin embargo, que ante un mandatario como el estadunidense, no se puede ni se debe proceder con “buena fe”, porque ante un personaje como Donald Trump pecar de inocente es pecar de tonto. Estamos frente a un vulgar negociante y no un estadista. Y en esa vertiente deberá ser el actuar del gobierno mexicano.
    Ex panistas que impulsan con todo su ánimo la idea de que a medio año de su sexenio la gestión de López Obrador ya fracasó, muestran de nueva cuenta lo peor de la derecha mexicana, o cuando menos la que ellos encarnan, donde no importan los medios y lo que se deba sacrificar para conseguir sus objetivos.
    Ellos, con Fox y Calderón, han sido el fracaso de más consecuencias para el país por la violencia desatada, el primero por su profesión de fe y sumisión a los intereses norteamericanos, el segundo por querer legitimar una presidencia espuria con una guerra absurda en contra del narco.
    Por lo mientras, la economía de México respira con este aplazamiento de los aranceles como medida electorera de un desquiciado Trump, que sin embargo ganará la reelección.

Mil gracias, hasta mañana.

jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico
@JavierEPeralta