ALFIL NEGRO
Una vez pasada la elección, con el triunfo total de Menchaca de MORENA y la derrota terrible de Viggiano del PRI, se presentan para cada partido retos a vencer y a los que se tienen que enfrentar porque así lo exigen las circunstancias, de acuerdo a lo que resultó de la elección.
MORENA
El partido ganador tiene el enorme reto de hacer un gobierno diferente en cuanto a los servidores públicos en el renglón de la honestidad y el servicio, sin ganancias para vivos y siempre al servicio de los ciudadanos.
Menchaca así lo prometió en la campaña, con el compromiso de atender con prioridad a los más pobres, y para ello advirtió que en los cargos de servicio estarán los que tengan las cualidades para desempeñarlos.
Conformar un gabinete de gente capaz y honrada, es el gran reto porque debe desechar a los cazadores del hueso y a muchos que exigirán el pago de sus apoyos con buen cargo y manejo de dinero.
No será fácil, pero debe hacerlo y dejar fuera a recomendados, cazadores de hueso, “lidercillos” abusivos que buscarán tener algo para seguir en su actividad de grillos, pero ahora cobijados, si lo logran, con algún encargo oficial.
Menchaca ya dijo que serán parte de su equipo quienes trabajaron con él en la campaña, porque los conoce y sabe cómo son y eso es bueno.
El otro ángulo de su gobierno es el de la relación con el gobierno federal, de tal manera que en la solidaridad con palacio Nacional prevalezca la agenda responsable de Hidalgo.
Desde luego, ya como gobernador, Menchaca que no es hombre de rencores ,debe ser generoso con todos, incluso con quienes en su momento lo ignoraron o descalificaron, porque así lo dictaba alguien y lograr la unidad de todos por el bien de Hidalgo.
No son retos menores y a ellos se debe enfrentar el nuevo gobernador.
EL PRI
La tiene más difícil, porque le hará falta sobre todo humildad política para aceptar con altura que perdió y que los únicos culpables son ellos mismos, por privilegiar las ambiciones y caprichos de algunos en detrimento de los priistas de Hidalgo.
Hubo mucha soberbia que no les dejó ver que caminaban al abismo, pensando que ellos, los jefazos de la campaña, sabían los caminos del triunfo y así les fue.
Para solucionar un problema primero se debe aceptar que se tiene ese problema, porque el sol no se tapa con un dedo.
Mucho tendrá que trabajar el partido tricolor para volver de sus cenizas.
Aquí en Hidalgo no valen las dirigencias nacionales, ni las ambiciones de algunos, porque la fuerza de este bastión tricolor está en su unidad y en el trabajo de todos.
Los iluminados aquí no funcionan. Para volver de sus cenizas mucho tendrán que trabajar.
Porque en una sola jugada mal hecha perdieron todo.
Vamos a ver qué hacen.
Para empezar, darse cuenta que perdieron, que la gente no apoyo a su candidata y empezar de cero para volver a los buenos tiempos.
