Limitan descuento en el transporte público

LOS PRINCIPALES AFECTADOS, ADULTOS MAYORES
A pesar de que la Semot aseguró que todos los que cumplan con los perfiles tienen acceso al beneficio, en algunas rutas de Pachuca y Tulancingo condicionan el descuento

Ante el aumento de las tarifas de transporte público en todo el estado desde el mes de enero y el cambio de cobro de estas, diversas rutas de Pachuca y Tulancingo no respetan las disposiciones hechas por la Secretaría de Movilidad y Transporte de Hidalgo (Semot) en el sentido de los descuentos a adultos mayores y personas con capacidades diferentes, limitando dichos beneficios.
    En la ciudad de Pachuca existe el caso de una ruta, la que va del Centro Histórico hacia el municipio de Mineral del Chico, en donde se efectúa el descuento del 50 por ciento del costo total a los sectores antes descritos, pero con dos condiciones, la primera es que presenten una identificación que los acredite como tal, y la segunda es que solo las primeras dos personas por viaje pueden tener acceso al beneficio.
    De este modo, si viajan más personas con las mismas condiciones no tendrán oportunidad de pagar la mitad de la tarifa establecida por los organismos estatales, y en cambio pagarán el costo normal, afectando su economía.
    Por otra parte, en Tulancingo también se tiene registro de rutas de transporte convencional que no respetan el descuento, y que en cambio se limitan a beneficiar a solo dos personas por viaje, por lo que es el municipio que más quejas se tienen a las oficinas del Sistema de Transporte Convencional de Hidalgo (STCH).
    Se refiere que las rutas que más quejas se tienen son las que salen de la ciudad hacia las comunidades aledañas, en donde los principales perjudicados son los adultos mayores, mientras que el resto de las concesiones respetan el costo del tarifario oficial y el respectivo descuento presentando una identificación.
    De este modo, algunos testimonios acusan de que muchas de las rutas involucradas tenían la indicación que el descuento era obligatorio para los pasajeros que reunían los requisitos, independientemente del número de personas y de los viajes, pero que de forma ventajosa los quitaron para limitar los beneficios, siendo sujetos a sanciones por desacato.

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