Después de 18 años de participación dice “adiós”
• El espectáculo se realiza año tras año en la comunidad de San Pedro Huaquilpan, como parte de las tradiciones quede viven en el municipio
Ubicado al sur del estado de Hidalgo se encuentra el municipio de Zapotlán de Juárez, lugar que conserva sus costumbres y tradiciones, tal y como lo hacen los habitantes de la colonia Niños Héroes de la comunidad de San Pedro Huaquilpan, que año tras año celebran en grande una de las festividades que convoca a cientos de turista aledaños al municipio.
Dentro de las actividades que se realizan en la feria de “La Héroes”, además de los bailes populares y quema de fuegos pirotécnicos, los asistentes disfrutan de la tradicional “Mojiganga”, en donde hombres se visten de mujeres, sus pronunciadas caderas, glúteos y busto están muy bien definidos por objetos como globos o tiras de telas que sirven para embellecer las partes esculturales de lo que sería el cuerpo de una mujer.
Desde días antes, se escuchan comentarios del revuelo y emoción que causa la “Mojiganga” en niños, jóvenes, adultos y mujeres, quienes salen desde las dos de la tarde para observar el show que más de 50 integrantes realizan en las principales calles de la colonia.
En entrevista para Diario Plaza Juárez así lo relata Abisai Jiménez Pérez, integrante del grupo de hombres, que buscan brindar diversión y un rato ameno a los asistentes, “tengo 18 años participando en ésta actividad, y justo ésta es mi despedida, pues soy el más viejo de los que quedan, hablando del tiempo de mi participación, pues inicié a los 15-16 años, así que hay que dar paso a los más pequeños para que continúen preservando ésta tradición”.
Con lágrimas y la voz entrecortada, recuerda sus inicios en donde como cada año ha buscado perfeccionar su vestuario, “inicié en esto por tradición, ya que mis tíos siempre habían participado, entonces es de familia; la Mojiganga se trata de jóvenes que se visten de mujeres y salen a las calles con el reto de perseguir a todos aquellos varones que andan curioseando, no importa si anda con su pareja, o que tan veloces sean, el perseguirlos es un reto pues no es nada fácil correr en tacones”.
Luego de recorrer las calles, en la explanada principal de la colonia, cientos de personas los esperan, pues el momento crucial había llegado y el ruedo se encontraba listo para recibirlos, para soltar a un toro bravo que los persiguió y avivó la adrenalina tanto de los participantes como de los asistentes.
¿Qué significado tiene entrar al ruedo y provocar a esa bestia? Bueno para nosotros es como el vivir diario de un mexicano, la vida te trata como niño, puta, político, millonario o el papel que queramos vivir, pero al final la vida la representamos con el toro ya que siempre buscará la manera de chingarte y de ti depende si la afrontas y te llevas el premio que en este caso son los aplausos de los asistentes, o bien si sólo le corres y te conformas con ver cómo los otros se llevan lo mejor, así lo describió Abisai.
Jiménez Pérez detalló que no existe edad para ser partícipe, siempre y cuando los papás autoricen la participación, ” una vez que vamos a entrar al ruedo los más pequeños no participan, pues el toro que sueltan es bravo y han existido ocasiones en las que hay lesionados, por eso tratamos que sean los más experimentados quienes participen en ese momento, aunque no existen requisitos; ya que no importa condición física ni económica, existe un joven que se encuentra en sillas de ruedas y participa con nosotros, así que todos los que se quieran integrar son bienvenidos”.
Como parte de la historia, detalló que “al principio la tradición dictaba que fuera una boda, entre un chico cualquiera y una prostituta, obvio toda la familia de la novia son iguales, unas feas, otras peores y otras más horribles, finalmente siempre feas (que es lo que causa risa a las personas), pero siempre hombres participando, haciendo una sátira del calvario de un matrimonio y nunca con el afán de ofender a nadie”.
Para ésta ocasión la temática fue diferente, pues se realizó un certamen de belleza que a decir de propia voz del participante fue “Certamen de felleza”, en donde se calificó vestuario, porte y originalidad, resultando ganador “Fernando Montes De Oca”, personaje que representó Jiménez Pérez, con sensual vestuario de colegiala, en donde los chiflidos de los caballeros no se hicieron esperar, a quienes correspondió enviando besos.
Una vez concluido el show, los participantes pasaron entre el público para solicitar cooperación, y lo recaudado en ésta ocasión se destinó a uno de los ex participantes que se encuentra enfermo.
Mientras tanto el momento no tan esperado por Abisai Jiménez llegó, y en el ruedo se anunció que fue su última participación en la Mojiganga, compañeros, vecinos, amigos, familiares y asistentes ovacionaron y agradecieron al joven la entrega, dedicación y lealtad que año tras año entregó en el ruedo, “pues entrar al ruedo es fácil, pero sólo Dios sabe si saldremos ilesos”.
Misma despedida que conmovió a todos ya que se destaca por su alegría, talento y esa peculiar manera que siempre tuvo para hacer sonreír a más de uno durante su participación; dijo que parte de su retiro se debe a que en próximos días formará una familia y ello implica entrega y dedicación, “no puedo seguir arriesgándome así, la adrenalina y experiencia son parte de mis recuerdos, mi tiempo pasó, lo viví y disfruté, ahora me toca iniciar otra etapa de mi vida, al menos tengo gratos momentos que contar a mis hijos”, concluyó.
