Aunque la víctima de los hechos protagonizados por La Manada en los Sanfermines de 2016 dudaba si continuar o no la batalla legal, finalmente lo hará. «Decidió que va a recurrir, fundamentalmente porque la hemos convencido al explicarla, entre otras cosas, que de no seguir adelante se podría malinterpretar», explicó Carlos María Bacaicoa, el letrado de Pamplona de la denunciante.
Quizá también le haya llegado la fuerza de las protestas que se han dado en toda España contra el fallo al grito de «no es abuso, es violación».
Sea como fuere, los abogados «vamos a presentar el recurso cuando buenamente podamos y dentro del plazo que hay hasta el día 15 de mayo, ya que son 10 días hábiles».
Bacaicoa y Miguel Ángel Morán están analizando por donde enfocar el recurso, aunque ya tienen una idea bastante claro. «Nuestro recurso –prosigue el letrado– va a ser más sencillo y más fácil que el de las defensas porque el juez recoge todos los hechos probados tal y como contó mi cliente. Entonces, nuestra valoración va a ser una infracción de ley por no haber aplicado bien el Código Penal».
Preguntado sobre la decisión que han tomado tanto el Ayuntamiento de Pamplona como la Fiscalía de la Comunidad Foral de Navarra, Bacaicoa afirmó que «hubiera sido muy raro que no hubieran recurrido. Si pides una serie de años y te conceden poco más de la tercera parte si no recurres parece raro para cualquiera de las partes».
Paralelamente, los condenados a nueve años de prisión por un abuso sexual con prevalimiento no están muy contentos, al menos tres de ellos, los que se encuentran en el Centro Penitenciario de Pamplona: José Ángel Prenda, Jesús Escudero y Ángel Boza.
