
La princesa de Gales, Catalina, ha abandonado el hospital donde se sometió hace casi dos semanas a una cirugía abdominal y regresado a su domicilio de Windsor, donde está “realizando buenos progresos”, según informó este lunes el palacio de Kensington.
La esposa del príncipe Gillermo, heredero al trono británico, ingresó en el hospital privado londinense The London Clinic el pasado 16 de enero para someterse a una intervención abdominal planeada de la que no se dieron más detalles, se prevé que tendrá que pasar ahora varios meses recuperándose.