EL PEQUEÑO TIMMY
- Ello, se debe a la falta de trabajo serio, la cantidad de iniciativas inútiles y sin fines prácticos; una legislatura de temas que requieren revisiones a profundidad y que con tal de “simular” trabajo, se quedan en revisiones y correcciones de estilo que de nada sirven al pueblo
Cuando hemos visto diputados con playeras de equipos de fútbol subir a tribuna, peliteñidas interpretando cantos cristianos o poniendo la canción de las golondrinas en el micrófono del salón de plenos, pensamos que ya no puede haber más.
Entonces, salen diputados cargando su kilito de huevo o pinochos mentirosos cínicos de Tula de Allende y aún así vamos pensando en que el Congreso Local no puede estar peor pero surgen las garrapatas que se convierten en diputados federales, presidentes municipales y otros cargos desde los que buscan un lugar en la polaca sabiendo el mediocre perfil y nula preparación que tienen.
Así las cosas en el Poder Legislativo, donde todos se hacen de poder pero pocos llegan a legislar, hoy la legislatura que quiere convertirse en la de la DE INCLUSIÓN va pasar a convertirse en la peor de todas, por la falta de trabajo serio, la cantidad de iniciativas inútiles y sin fines prácticos; una legislatura de temas que requieren revisiones a profundidad y que con tal de “simular” trabajo, se quedan en revisiones y correcciones de estilo que de nada sirven al pueblo en la realidad.
No nos engañemos, el mediocre actuar de los diputadas y diputadas que parten pasteles en la diputación permanente, que salen a “tragar” dejando sin quórum la sesión, o aquellos que se hacen diputados independientes por puritita traición, no se comparan con ninguna otra legislatura, y el problema es de los perfiles mediocres, buenos para nada, que ni leer saben las iniciativas, que se supone ellos hacen.
La 65 Legislatura se encamina a la que más iniciativas tendrá pero también la que más temas inútiles, letras muertas y modificaciones hayan hecho sin oficio ni beneficio, porque ciertamente de nada sirve cambiar un punto y coma o incluir la palabra mujer si en el territorio la delincuencia, la falta de apoyo a los sectores, la pobreza, la miseria y la injusticia, sigue alcanzando a los más jodidos.
De nada sirve poner un puntito o agregar un apartado que hable de la comunidad LGBT, si en la realidad hay un puñado de políticos impunes por delitos en contra de la comunidad y “un chorro” de gente pobre pagando delitos que hijos de ex funcionarios o políticos mismos cometieron.
Tampoco sirve incluir derechos en la constitución estatal sin que haya acciones para que estos se puedan ejercer con plenitud; es decir, de nada sirve decir que es un derecho la educación sino se legisla para garantizarla, de nada sirve que es un derecho la vivienda si no hay soluciones integrales que permitan a la mayoría de los hidalguenses hacerse de una casa. Y de nada sirve decir que el hidalguense tiene derecho a la dispersión cuando una salida al cine puede costar tanto como el gasto de una semana en alimentos para una familia.
La peor legislatura que se ha vivido en Hidalgo es la actual, por una serie de diputados que no tienen rumbo, que no tienen oficio, que son ignorantes y que desgraciadamente la ignorancia no les quita la ambición ni el poder para aprovecharse de un cargo que creen que será eterno.
Esto sin duda, nada aporta al cambio verdadero ni a la lucha contra la corrupción, el saco que se ha confeccionado no está hecho a la medida para alguien en particular pero bien puede quedarle a diputados y diputadas de todas las fracciones, faltistas, gorrones, cínicos, sinvergüenzas, torpes y simuladores.
