RELATOS DE VIDA

La vida no siempre le había sonreído, aún así era feliz y trataba de demostrar la mayor parte del tiempo, no solo sonriendo, sino también siendo amable, ayudando a los demás, y buscando el lado positivo de toda situación.

Sin embargo, había ocasiones en que el hecho de mostrarse feliz le cobraba facturas muy fuertes y crueles, ya sea con algún malestar, con problemas económicos, con comentarios dañinos, o bien, con acciones que buscaban denigrar.

Para no caer abatidas ante esos momentos, buscaba la mejor parte de la situación, y el mejor argumento que encontraba era que se trataban de pruebas para seguir siendo fiel a sus principios, valores, optimismo y felicidad ante las adversidades.

Hasta que un día, sola en casa, y después de varias copas de vino tinto analizó su vida, desde que era muy pequeña hasta la época actual, y concluyó que la película de su vida es de drama con un toque de comedia, la cual imprime personalmente para no desfallecer ante la falta de amor, las consecutivas infidelidades y los constantes reproches de su familia por no tener éxitos personales ni laborales.

Se sirvió una copa más de vino, brindó por sus caídas, tristezas y fracasos, pero brindó con dos copas más agradeciendo por seguir viva y disfrutando de su drama y comedia, al final de cuentas así es ella, dramáticamente feliz.