
La ofensiva terrestre rusa en Ucrania se ralentiza por la falta de efectivos y la exitosa contraofensiva ucraniana y, según la Inteligencia británica, el Ejército ruso podría haber perdido un tercio de las fuerzas de tierra que penetraron en territorio ucraniano hace casi tres meses.
“A día de hoy, Rusia ha sufrido bajas que ascienden, probablemente, a un tercio de las tropas de tierra que entraron en combate en febrero”, informó el Ministerio de Defensa británico en Twitter.
En vísperas de la contienda, Rusia concentró más de 100,000 soldados en la frontera con Ucrania y en la anexionada península de Crimea, lo que no incluye a las tripulaciones de la veintena de buques de guerra estacionados frente a las costas ucranianas o de los aviones que bombardean el país.
LA OFENSIVA EN EL DONBÁS SE RETRASA
“A pesar de los avances iniciales a pequeña escala, Rusia ha sido incapaz de lograr importantes ganancias territoriales durante el último mes”, señala la inteligencia militar británica.
Por todo ello, añade, la ofensiva sobre el Donbás “ha perdido fuerza y transcurre muy por detrás de los plazos marcados” cuando comenzó la “operación militar especial” rusa el 24 de febrero.