La luz de una tradición que se apaga

CANDELARIA
Presentación del señor en el templo y purificación de la virgen

Si bien la celebración del día de la Candelaria es una tradición arraigada entre los católicos al recordar la presentación del Niño Jesús al Templo; el nombre tiene su origen en las velas o candelas que los fieles llevaban en la procesión; sin embargo para algunos comerciantes y restauradores de imágenes, esta luz pareciera extinguirse con el paso de los años.
Faustino García Vera,  es un reparador de “Niños Dios” con experiencia de más de 25 años; profesión que ha heredado a su familia, principalmente a sus hijos, quienes contribuyen cada año esta noble y dedicada labor, que registra una notable baja.
“En el transcurso de los años ha bajado un poco, también han bajado mucho las religiones… antes era mucho trabajo, pero las tradiciones cambian…cada cabeza es un mundo y piensa diferente, cambian de religión, ya no les interesa, son varios motivos, pero es una decisión propia”, señaló.
Sin embargo puntualizó, que además de las cuestiones ideológicas, las disposiciones municipales también sufrieron modificaciones con el cambio de administración, reduciendo su estancia para comercialización a una semana, lo que impacta directamente en su trabajo y ganancias.
“Nos quitaron una semana de ponernos, nos dejaron ocho días nada más, antes eran dos semanas, y se pierde la mitad de trabajo, es decir, cerca de 300 niños para reparar, impacta bastante, esperemos que den permiso más tiempo”, dijo.
García Vera recordó que anteriormente la cifra de reparaciones oscilaba entre 400 y 500 “niños Dios”, no obstante con las nuevas políticas y el cambio de tradiciones, la demanda de restauraciones bajo más de la mitad.
Respecto al oficio que desempeña manifestó, que los tamaños de imágenes más comunes son de cinco, 17, 20, 25, 30 y hasta 40 centímetros; las reparaciones más usuales son por el rompimiento de dedos, pies y cabeza; y los costos oscilan entre los 30, 50, 100, 150 y 200 pesos, precios que incluyen el baño completo, es decir “pintarlo completo con pestañas”.
Destacó que el día más fuerte es el primero de febrero e incluso algunos clientes acuden el dos, para una reparación rápida, “Como somos mexicanos, todo a la mera,  el primero de febrero es la locura, vienen a dejarlos…otros llegan el dos y quieren las cosas rápido y al instante, pero soy honesto a mí no me gusta, es dinero para mí pero se les va a caer porque se tiene que secar”.
En tanto, Faustino Vera García señaló que además de la temporada fuerte de reparaciones, la el servicio de restauración lo realiza durante todo el año, en un local ubicado en calle Reforma, número 903 barrio en la colonia El arbolito.

Historia
Con base en información católica, Candelaria, es un nombre femenino de origen latino “Candela”, vela; su significado es “Aquella que purifica con la luz”; y la costumbre tiene su origen en la celebración litúrgica de la fiesta de la purificación y la presentación del Niño Dios al templo.
En tiempo de Jesús, la ley prescribía en el Levítico (Libro de la Biblia que trata sobre los sacrificios y ceremonias de los levitas), que toda mujer debía presentarse en el templo para purificarse a los cuarenta días que hubiese dado a luz; si el hijo nacido era varón, debía ser circuncidado a los ocho días y la madre debería permanecer en su casa durante treinta y tres días más, purificándose a través del recogimiento y la oración.
Ya que se cumpliera la fecha, acudía en compañía de su esposo a las puertas del templo para llevar una ofrenda: un cordero y una paloma o tórtola; Con respecto al niño, todo primogénito debía ser consagrado al Señor, en recuerdo de los primogénitos de Egipto que había salvado Dios.
José y María llevaron a Jesús al templo de Jerusalén. Como eran pobres, llevaron dos palomas blancas. Al entrar al templo, el anciano Simeón, movido por el Espíritu Santo, tomó en brazos a Jesús y lo bendijo diciendo que Él sería la luz que iluminaría a los gentiles. Después, le dijo a María que una espada atravesaría su alma, profetizando los sufrimientos que tendría que afrontar.
Fiesta del día de la Candelaria
En México, se acostumbra que aquellos a quienes les tocó el muñeco de la rosca de reyes, son los que deberán presentarlo en el templo el día de la Candelas; para ello tienen que vestirlo y engalanarlo, y también, comprarle un trono para sentarlo.
Al respecto, en el caso de la capital del estado, en la plaza Constitución ubicada frente al mercado Primero de Mayo, durante esta temporada diversos comercios se establecen ofreciendo el servicio de “vestir al Niño Dios”.
Entre las vestimentas se encuentran el del Niño del buen consejo, de la caridad y el cobre, del ropón, de la fe y el trabajo, de la misericordia, de bautizo, de las mariposas y de la suerte; y también solicitan vestirlo como San Miguel arcángel, San Benito Abad o San Charbel.
Es importante señalar que además de llevar a bendecir la imagen del Niño Dios, se hace lo mismo con las velas, que representan la luz de Cristo en los hogares, ya que las velas benditas se pueden prender cuando surjan las dificultades de la vida durante el año.
Esta fiesta termina con una merienda familiar y de amigos, en la cual se sirven tamales y atole de sabores y chocolate caliente.

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