La AMFPro, sin total autonomía de la FMF

    •    Algunos de los integrantes de la Asociación aún devengan dinero que pasa por el órgano rector del balompié nacional, por más que se presuma independencia en todos los sentidos.




Tener autonomía económica, ideológica y jurídica, con relación a la Federación Mexicana de Futbol, es uno de los preceptos de la recién creada Asociación Mexicana de Futbolistas Profesionales (AMFPro), aunque no se cumple del todo.

La disolución de la Comisión del Jugador y la aparición de la AMFPro, respaldada hasta por los futbolistas mexicanos que pertenecen a clubes europeos, se dio como un intento real de contar con un órgano independiente que defienda a los jugadores, como recientemente ocurrió con la amenaza de paro en la última jornada de la fase regular en el Clausura 2018, si no desaparece el Pacto de Caballeros. El problema es que esa separación de la FMF no se ha dado completamente.

Una investigación realizada por EL UNIVERSAL Deportes revela que algunos de los integrantes de la Asociación aún devengan dinero que pasa por el órgano rector del balompié nacional, por más que se presuma independencia en todos los sentidos.

Es por eso que no hay una separación total, aunque es cierto que tampoco parece una parte de la propia FMF, como el organismo al que sustituyó.

Según los estatutos, la AMFPro opera con 1% de la derrama económica que representan todas las transferencias que se realizan en el balompié nacional, aunque se tiene un presupuesto anual que siempre es aproximado a los 17 millones de pesos, con el que se pagan los salarios de las 25 personas que laboran en la Asociación, cuyas oficinas están en Lerma, Estado de México, dentro del Parque Industrial que lleva el nombre de la población.

Para el espacio en el que están, cercano a los 100 metros cuadrados, pagan una renta mensual de 60 mil pesos. La idea de estar fuera de las nuevas instalaciones del órgano rector del balompié nacional era clave para demostrar la autonomía que se tiene, aunque se optó por ubicarse en la misma ciudad, para atender con mayor rapidez algún problema. Ese ha sido el discurso.

Hace algunas semanas, en entrevista con el Gran Diario de México, Álvaro Ortiz, responsable operativo de la AMFPro, aseguró que los salarios de los trabajadores y el dinero para operarla vienen de una instancia completamente ajena a la FMF, con lo que se transparenta que está desligada al organismo, lo que debería dar certeza a ese grupo de futbolistas que anhela ser verdaderamente defendido en momentos muy complicados.
Pero, al parecer, la independencia no es total.
 
Las leyes, por arriba de los reglamentos: FMF
 
Por otro lado, las leyes mexicanas están por encima de los acuerdos comerciales, así que las empresas cerveceras y casas de apuestas, deberán dejar de anunciarse con los clubes cuando quienes estén jugando sean menores de edad.
 
La Ley General de Derechos de niñas, niños y adolescentes, marca que “no estarán permitidos los patrocinios de bebidas alcohólicas y casas de apuestas en las prendas que usen menores de edad”, lo que compete directamente a los equipos Sub-15 y Sub-17 de los clubes de Liga MX.

Y no se debería pedir indemnización alguna de estas empresas, “si ponderas el derecho de un niño de no ser relacionado con casas de apuestas, con bebidas alcohólicas contra un derecho de estas compañías que habrían pagado, claro que está por arriba el derecho de los niños”, afirmó Ernesto Meade, abogado especializado en derecho deportivo.

La Federación Mexicana de Futbol, respondió a esta Ley, manifestando que “tanto la Asociación como sus clubes afiliados han actuado en apego a las normas aplicables a la materia, no recibiendo ninguna prohibición o restricción al respecto por parte de la autoridad competente”.

Hasta el momento, no han recibido ningún aviso al respecto, pero… “no obstante, la FMF, todas las divisiones y las áreas que la integran, así como sus clubes afiliados, están en contra de todo elemento, conducta o actividad nociva para las niñas, niños, y adolescentes, por lo que ha exhortado a sus afiliados a abstenerse de colocar publicidad relativa al tema que nos ocupa en los uniformes que utilicen los menores de edad”.

La imposición también es para el primer equipo, los menores de 18 años que juegan en la Liga MX, como es Diego Lainez (17 años y 10 meses), deberán de abstenerse de portar esas marcas, “sí —agrega—, lo de Lainez quizá se les complicaría, pero es un menor y hay que proteger sus derechos”.

Al final, “arriba de todo está la ley, los derechos de los menores. Si Diego Lainez tiene que salir con una camisa distinta a sus compañeros, no deberá existir ningún problema. Los reglamentos deportivos no pueden violentar las leyes en ningún sentido, vengan de donde vengan”, finalizó el abogado.

Related posts