Dirigentes de la CNTE afirmaron que pese a la “represión e intimidación” contra el magisterio disidente, el plan de acción aprobado por su asamblea nacional, que incluye mítines y marchas, “se mantiene, por lo que sostendremos el llamado a la movilización en la capital del país”.
Enrique Enríquez Ibarra, secretario general de la sección 9, afirmó que en el desalojo del plantón que instalaron la mañana del viernes en la Plaza de Santo Domingo, luego de que “fuimos presionados e intimidados para abandonar el campamento que teníamos en Bucareli, nos queda claro que ante la incapacidad del gobierno federal de dialogar, han optado por la represión”.
Junto con el secretario de la sección 22 de Oaxaca, Rubén Núñez Ginés, detallaron que este lunes irán a la CNDH a interponer una denuncia por la “violación a los derechos de libertad de expresión y de tránsito”, pues destacaron que tanto el gobierno federal como el local, “incurrieron en actos de represión contra nuestros compañeros”.
Enrique Enríquez afirmó que el gobierno federal de Enrique Peña Nieto, y el de Miguel Ángel Mancera, “han involucionado más de 30 años, al aplicar mecanismos represores que la CNTE no veía en más de tres décadas en la capital del país, al obligar a nuestros compañeros a subir a autobuses para sacarlos de la ciudad, lo que es violatorio de nuestros derechos constitucionales”.
Denunciaron que hasta el momento no han podido tener contacto con los docentes, quienes fueron trasladados en “34 autobuses ayer de madrugada, custodiados por elementos de la Policía Federal y capitalina. Responsabilizamos a autoridades de ambos niveles de gobierno de cualquier cosa que pudiera pasarles”.